Juez Guzmán en jaque

Ni más ni menos que la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, se puso al lado del máximo tribunal del país para poner en jaque la última jugada del retirado juez que procesó al general (R) Augusto Pinochet, Juan Guzmán Tapia, y exigirle pruebas y nombres que respalden las duras acusaciones que lanzó contra los integrantes de la Corte Suprema que habrían alcanzado sus cargos arrastrando oscuras historias personales.

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La Presidenta Michelle Bachelet calificó ayer de “graves” las declaraciones de Guzmán, señalando que es de esperar que sus dichos “se funden en pruebas, pruebas serias, de manera que se puedan investigar”.

La calificó ayer de “graves” las declaraciones de Guzmán, señalando que .

Era la respuesta a los dardos que descargó el ex magistrado contra ciertos supremos que según dijo el jueves habrían alcanzado la máxima magistratura luego de haber tenido conductas reprochables, desde bailar desnudos sobre las mesas de un prostíbulo hasta aceptar coimas de abogados que actuaron en dictadura.

Como era de esperar, tampoco permaneció indiferente la Corte Suprema. A través de una declaración pública, el máximo tribunal reprochó a Guzmán Tapia que no se haya hecho cargo de las denuncias como corresponde a alguien que tan bien conoce los caminos de la justicia, y haya eludido la responsabilidad de entregar antecedentes que permitan abrir una investigación seria sobre las competencias de los integrantes del máximo tribunal.

Es más, le enrostraron las graves imputaciones sin pruebas ni directos aludidos, pues éstas “impiden comprobar su veracidad” y son cuestionables al “emanar de un ex integrante del Poder Judicial y actual decano de una facultad de derecho".

Los 16 ministros que integraron ayer el pleno ordinario expresaron su “extrañeza por la oportunidad en que han sido vertidas” las acusaciones, justo después que senadores de derecha no dieron los votos para alcanzar el quórum que requería la ratificación del nombre del ministro Carlos Cerda, a cargo del caso Riggs, para ocupar un puesto en el ahora cuestionado elenco judicial.

Más aún, el pleno rechazó que la ofensiva proviniera justamente de “una persona que hace poco tiempo ha dejado de ser funcionario judicial, pues se refieren a posibles conductas que eventualmente, de ser efectivas, algunas de ellas, podrían contrariar el ordenamiento jurídico".

Por lo mismo, el organismo indicó que “sería aconsejable investigarlas, e incluso sancionarlas si fuera procedente, para no tender un manto de dudas indeterminado, que en tales circunstancias resulta infundado y aventurado", precisando que “al no referirse a personas precisas e individualizadas, no asume su responsabilidad e inhibe la iniciación de investigaciones al respecto".

Ya antes el ministro de Justicia, Isidro Solís, había expresado su preocupación por los efectos en la imagen de la institución. La Corte Suprema “es el principal tribunal del país, es el encargado de fallar todas las causas importantes, y por lo tanto, una imputación genérica le hace muy mal a Chile”, dijo Solís en el programa Medianoche, recalcando que "sería bueno que él (Guzmán) precisara sus dichos, para saber con exactitud quiénes son y cuando ocurrieron los hechos".

Así, la única salida del juez que procesó a Augusto Pinochet sería ahora dar a conocer los “santos y señas” de los supuestos magistrados que cargan las historias de burdeles, acoso sexual y coimas según sus propias palabras.

Pero ayer en Temuco el magistrado indicó que no da nombres “porque no soy tonto”. “Son cosas difíciles de probar, y si doy ahora nombres públicamente se puede tomar este ejercicio a la crítica que estoy haciendo como un ejercicio a la injuria, y no tengo ánimo de injuriar a nadie”, indicó, para precisar que este es “un animus criticandi”.

“Toda mi vida –sentenció- he estado dispuesto a luchar contra la verdad y si se trata de que se exigiera de mi presencia judicial en un lugar, sí (asistiré). Obviamente, yo soy obediente a la ley y a las órdenes judiciales de jueces competentes y, obviamente, que asistiría a la citación”.

Los polémicos dichos de Guzmán El ex juez Juan Guzmán dijo el jueves que "hay ministros conocidos porque han acosado sexualmente a mujeres durante años y no les ha pasado nada", agregando -sin dar nombres- que también "ha habido ministros que en alguna etapa de sus carreras bailaban desnudos sobre las mesas de los prostíbulos". Asimismo dijo que “hay ministros coimeros, cuyas señoras pedían joyas y alfombras y, sin embargo, en tiempos de Pinochet llegaron a la Corte Suprema” y otros “vinculados con los abogados más importantes del período de Pinochet y alguno de ellos es decano de alguna facultad de Derecho y se decía ‘es el ministro del abogado’”. Agregó en la oportunidad, “obviamente, también llamaban a los jueces para que nombraran peritos que eran hermanos de ellos. Uno de éstos fue objeto de un juicio político. No lo voy a nombrar, pero todos sabemos de quién se trata”, afirmó, en referencia aparente -según fuentes judiciales- a la acusación constitucional que la UDI presentó contra el ex presidente de la Suprema Servando Jordán en 1997.