La Flecha Roja en la encrucijada

Cambiar o no cambiar los estatutos, ese es el dilema en la Junta Nacional que se desarrolla hoy en el Congreso. Los bandos están divididos: Alvear se las juega por defender el derecho de cada militante a votar el 30 de abril, pero si Adolfo logra el respaldo a su propuesta para que sea la Junta la que defina a la nueva directiva la fecha se desvanecerá y sólo quedará convocar a una nueva reunión de los delegados para decidir quien encabezará el partido los próximos dos años.

Angélica Meneses

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La senadora Soledad Alvear, y los diputados Pablo Lorenzini y Jaime Mulet aspiran a ocupar la presidencia del partido de la Flecha Roja. El punto es cómo se medirán, pues mientras los dos primeros defienden la elección “un militante, un voto”, Mulet prefiere que sea la Junta Nacional la que elija, y para ello cuenta con el respaldo del actual timonel Adolfo Zaldívar, y de una decena de diputados, entre los que se cuenta Gabriel Ascencio.

Y este es, precisamente, el centro del debate que desde las 10:30 horas de hoy se realiza en la sede porteña del Congreso Nacional, pues allí se dieron cita los 400 delegados de la Junta Nacional, que inclinarán la balanza a favor de la elección con participación de los más de 60 mil militantes, o de la propuesta del actual timonel, quien luego de renunciar a repostularse en el cargo, lanzó la idea de cambiar los estatutos internos para que la Junta escoja a la nueva directiva.

El camino trazado por el colorin, se ha visto reforzado por su llamado a que se produzcan “gestos de generosidad” de los postulantes, enfatizando ante todo que no se puede “presidencializar” la definición, lo que equivale a pedirle a Alvear que siga su ejemplo y se retire de la carrera, para que deje despejado el camino y se convoque a una nueva Junta.

La ex canciller y actual senadora tiene claro que el margen con que se definirá el mecanismo electoral será estrecho, pues en anteriores Juntas Nacionales han sido 20 o 30 delegados los que han hecho la diferencia en las decisiones controvertidas, pero se ha mantenido firme y ha descartado tajantemente su salida de la carrera, a sabiendas también que Lorenzini –un ex colorin- le puede restar votos al adolfismo.

A la par, está conciente de que sus opciones crecen al ampliar el universo electoral. Por ello, defenderá hasta el fin la elección de “un militante, un voto”, y ha recalcado incluso que sería un “retroceso” no elegir por esta vía a los próximos dirigentes, en circunstancias que hasta la UDI se peleó por la “democratización” del partido, y la DC debe marcar la pauta en este campo.

El punto lo comparte el diputado Lorenzini, quien dijo que por ningún motivo bajará su candidatura. No así Mulet y sus partidarios, y tampoco el ex presidente Eduardo Frei, que hablan de un momento de división en que hay que dar “señales de unidad”.

Mulet suma apoyos

Gabriel Ascencio se perfilaba como posible carta presidencial del partido, pero abandonó sus aspiraciones por respaldar al favorito de Zaldívar, conformando anoche el grupo de “diputados por Mulet”, junto a Pedro Araya, Renán Fuentealba, Carlos Olivares, Alejandra Sepúlveda, Jorge Sabag, Mario Venegas, Eduardo Díaz, Sergio Ojeda y Carolina Goic.

De hecho, el ex presidente de la Cámara Baja planteó que corresponde citar a una nueva Junta después de que se elija a los dirigentes comunales y provinciales, de tal manera que la nueva composición de delegados sea la que defina a los líderes falangistas.

A este apoyo, Mulet suma una lista “integradora”, compuesta sólo por mujeres, que en caso de una competencia abierta, le servirán de argumento para contrarrestar el discurso de Alvear de que ya es hora de que las mujeres lleguen al poder en todos los estamentos.

Lo acompañan la diputada Alejandra Sepúlveda, la vicepresidenta Alejandra Bravo, Myriam Verdugo y Francisca Ortega Frei, hija de la ex senadora Carmen Frei. Y con estos dos últimos nombres espera atraer a la corriente “guatona”, restando puntos a Alvear y manteniendo el apoyo de Adolfo Zaldívar, quien dijo “Mulet es una persona de grandes condiciones para encabezar una nueva directiva”.

Los diez diputados por Mulet, declararon que “la tarea que ha encabezado Adolfo Zaldívar no puede quedar inconclusa y, por ello, la opción de Jaime Mulet como candidato a la presidencia del Partido Demócrata Cristiano es la que mejor encarna lo que debe ser la conducción del partido para los próximos años”.

Los colorines destacan su apoyo a la Presidenta Bachelet, con lo que reafirman la tesis de un partido que tiene como tarea primordial sacar adelante las metas del nuevo gobierno y no iniciar desde ya una carrera presidencial con miras al 2009. Así, subrayan la tarea de Mulet como una “brillante conducción en la Campaña Presidencial como Director Ejecutivo de la Presidenta Michelle Bachelet”.

Agregan que “Mulet seguirá luchando por lo que ha propuesto Adolfo Zaldívar, la corrección del modelo económico y, asimismo, él representa el cambio generacional que queremos impulsar dentro de nuestro partido”.