Confirman versión original por muerte de Anfruns

Exclusivo: informe de Investigaciones
Confirman versión original por muerte de Anfruns

El documento fue elaborado por la Brigada de Asuntos Especiales y Derechos Humanos. Descarta la versión del ex teniente de Carabineros Jorge Rodríguez, así como la participación de agentes de inteligencia de la dictadura. Después de 26 años, P.P.V. seguiría siendo el homicida.

Por Luis Narváez  La Nación  www.lanacion.cl

“Se puede concluir que no existen elementos de juicio o probatorios que permitan determinar que la muerte de Rodrigo Anfruns Papi se deba a la acción premeditada de parte de algún organismo de inteligencia del gobierno militar de la época, correspondiendo a un caso netamente policial ocurrido en una situación circunstancial, donde incluso se podría presumir que no existe la intencionalidad del autor de dar muerte”.
Es la conclusión a la que llegan los detectives de la Brigada de Asuntos Especiales y Derechos Humanos de Investigaciones (Baedh), organismo que recibió la orden para investigar los antecedentes que cuestionaban la tesis original acerca de la desaparición y posterior asesinato del menor Rodrigo Anfruns Papi, ocurrido en junio de 1979.
Es un caso antiguo, pero si en Chile hay policías que se han especializado en investigar casos ocurridos hace más de 20 años, son ellos. La conclusión parece tajante, pese a los esfuerzos de la familia del menor y el abogado Roberto Celedón, quienes el 2004 lograron que los tribunales reabrieran el caso.
Hace tres meses, la Corte de Apelaciones de Santiago, incluso, nombró a una ministra en visita (Dobra Lusic) para continuar la investigación.
Tres testigos, entre ellos, el teniente (r) de Carabineros Jorge Rodríguez Márquez, aseguraron haber visto la misma madrugada del día que el cadáver de Anfruns fue encontrado, el 14 de junio, a dos hombres sacar desde un vehículo un bulto y depositarlo en el suelo. A ello se sumaron las dudas de algunos especialistas que cuestionaron la data de muerte del menor, lo que hizo presumir que el niño habría sido secuestrado y torturado hasta poco antes de ser encontrado.
La jueza Dobra Lusic reinterrogó a la mayoría de los testigos y a ella le correspondió recibir este nuevo informe de más de 200 páginas.
Altas fuentes judiciales y policiales coinciden en que se trata de un documento realizado con “prolijidad” y especial atención, debido a la sensibilidad social que el caso ha provocado.
Los policías concluyeron esta vez que se trató realmente de un homicidio cometido por Patricio Pincheira Villalobos (conocido en la época como P.P.V.), “sin que se obtuvieran medios probatorios o elementos de juicio que permitieran comprobar los delitos de secuestro y tortura”.

La versión cuestionada

El informe de Investigaciones cuestiona duramente la versión del teniente Rodríguez: “No existe elemento alguno que permita establecer la efectividad de los dichos del ex oficial de Carabineros de Chile, Jorge Alejandro Guillermo Rodríguez Márquez, quien manifiesta que en la madrugada del 14 de junio de 1979 él se encontraba en los alrededores del sitio eriazo en compañía de subalternos, uno de los cuales está fallecido, mientras que el otro declara que nunca estuvo en ese momento, ni se enteró de esa situación por comentarios de los hechos relatados por el entonces teniente Rodríguez”.
Para intentar comprobar la versión, incluso sostienen que se ubicó a la totalidad de los funcionarios de la comisión civil de Carabineros y algunos funcionarios de la 14a Comisaría de Providencia, colegas del oficial. Todos ellos manifiestan que “nunca escucharon o se enteraron de la situación relatada por éste (Rodríguez) en los medios de comunicación, por lo cual se establece que su declaración carece de veracidad”.
Investigaciones analizó, con la metodología criminalística actual, las pericias realizadas a la época del crimen. Todos los testigos, así como los policías que originalmente participaron en la investigación coinciden en que Pincheira Villalobos interceptó a Rodrigo Anfruns la tarde del 3 de junio de 1979 en la calle Juan Agustín Barriga. Sin mediar fuerza, se fueron a jugar a un sitio eriazo ubicado en la misma calle y a metros de la casa de los abuelos maternos del menor.
En ese lugar, según el nuevo informe, Pincheira intento abusar sexualmente del niño Anfruns. Como el menor se resistió, lo asfixió con sus manos hasta morir. El informe de autopsia emitido por el Servicio Médico Legal, el 15 de junio de 1979, dice que la causa de muerte corresponde a un “estado asfístico”.
La Baedh sostiene que: “Conforme a los antecedentes logrados recabar en el transcurso de la investigación, declaraciones insertas, peritajes actuales, de la época y declaración del imputado, es posible establecer que el responsable de la muerte de Rodrigo Anfruns Papi corresponde a Patricio Omar Pincheira Villalobos, estableciendo que el mecanismo causal correspondería a una sofocación manual”.
Existían dudas respecto a la muerte del menor debido a que un médico que vio el cuerpo sin vida de Anfruns, en el mismo sitio del suceso, declaró que por su estado no podía tener más de 48 horas de fallecido. A esto se agrega que se comentó que el cuerpo tenía quemaduras y laceraciones.
El informe actual, menciona que el doctor José Belleti, especialista interpelado, sostiene que “existen elementos categóricos científicos que permiten determinar la data de muerte, tipo de lesiones, causa de muerte, mecanismo y los diversos factores que influyeron en el retardo de los fenómenos cadavéricos”. Por lo mismo, aclara que no hubo quemaduras, sino que “lesiones post-mortem características por apoyo prolongado del cuerpo sobre una superficie irregular”.
Respecto a la versión de un vehículo sospechoso visto la madrugada que el cuerpo fue encontrado, éste correspondería, según el nuevo informe policial, al momento en que Pincheira le mostró a los detectives el lugar donde estaba Rodrigo Anfruns. A este último lo bajaron del vehículo policial cubierto con una frazada (era invierno). Fue entonces que el adolescente apunta al sitio.
La ministra Lusic continúa realizando interrogatorios. De hecho una de las diligencias más esperada es la entrevista al propio teniente Jorge Rodríguez. Una vez concluida esa etapa, debiera resolver el futuro del proceso. LN
 

Desaparecido y no muerto

Uno de los cuestionamientos que se hizo en su momento fue el hecho de que durante 11 días de búsqueda, nadie se haya percatado que a pocos metros de donde desapareció estaba el cuerpo. Ni los perros adiestrados lograron olfatear al menor.
El informe actual de Investigaciones revela tres antecedentes clave para comprender la situación. La existencia de una planta llamada palqui en el lugar, pudo alterar el sentido del olfato de los animales.
Para comprobar esto, anexan un informe de la Brigada Investigadora de Delitos del Medio Ambiente y Patrimonio Cultural que describe al arbusto como de “gran capacidad tóxica y alta repelencia olfativa a los animales mayores y menores”.
Otro elemento que analiza el nuevo informe es el hecho de que a la época de la desaparición, Carabineros se encontraba en una etapa inicial de adiestramiento para perros, que “no tenían la experiencia suficiente para rastrear restos humanos”.
Por último, sostienen que los rastreos se realizaron “de manera poco minuciosa y prolija, tomando en consideración que nunca buscaron a un Rodrigo Anfruns muerto, ya que según los mismos relatos e información de prensa de la época, se pensaba que éste estaba desaparecido”.
 
Cronología
1979: 3 de junio: desaparece Rodrigo Anfruns
13 de junio: detienen a P.P.V. como sospechoso
14 de junio: encuentran cadáver del menor
1982:Caso es sobreseído con PPV como autor de homicidio
2004:Junio: se reabre el proceso en tribunales
2005: Octubre: designan ministra en visita