Chilenos involucrados en red internacional de pornografía infantil serían sólo receptores

 Según indicó el jefe de Interpol en Chile, comisario Joel Hernández, "tenemos información que son más bien receptores (...) todos esos detalles los va a arrojar la investigación que se lleva a cabo".

En Austria, las autoridades anunciaron la desarticulación de la red que cuenta con 2.360 sospechosos en 77 naciones, entre ellas Chile.

www.latercera.cl Fecha edición: 07/02/2007 14:13

Interpol Chile investigaba desde septiembre, en coordinación con la Fiscalía Centro Norte, la participación de chilenos en la red de pornografía infantil desbaratada mundialmente y cuya existencia fue revelada hoy en Austria bajo el nombre de operación Flea (pulga en inglés).

Así lo afirmó el jefe de la policía internacional en el país, comisario Joel Hernández, añadiendo sobre los presuntos involucrados en el territorio nacional que "tenemos información que son más bien receptores", y agregó que según aumenta el acceso a Internet, este tipo de delitos tiende a aumentar.

La autoridad policial no quiso entregar mayores antecedentes sobre el caso, recalcando que "todos esos detalles los va a arrojar la investigación que se lleva a cabo".

"Estamos haciendo las diligencias de rigor encomendadas por la fiscalía (..) esperamos tener resultados positivos lo más pronto posible", afirmó el comisario Hernández.

El jefe de Interpol en Chile destacó que la institución "está pendiente de este tema, tenemos los mecanismos para desarticular este tipo de redes, estamos trabajando en forma coordinada con todas las interpoles involucradas para detener a los presuntos autores que figuran como suscriptores de estas redes".

Hernández sostuvo que "esta es una de las redes más grandes que hemos detectado a nivel internacional", de allí la reserva con que se maneja el caso.

En la enorme red internacional de pornografía infantil hay 2.360 sospechosos en 77 países, entre ellos Chile,  y según aseguró el ministro austríaco del Interior, Günther Platter, es la mayor operación mundial en este tipo de delito, lo que también fue avalado por el comisario Hernández.

El jefe de Interpol en Chile aseguró que a nivel local se desconocía que la información sobre la existencia del grupo ilegal sería dada a conocer hoy en Europa.

El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, aseguró que existió coordinación previa en la investigación de la red de pornografía infantil. El contacto con Chile se tomó "hace un tiempo atrás", dijo, añadiendo que "hasta el momento lo que ha ocurrido es que las autoridades a través de Interpol han informado debidamente a las autoridades policiales y judiciales chilenas y se está desarrollando la investigación".

Además de Chile, hay sospechosos de otros 15 países latinoamericanos que figuran en el grupo. Gerald Hesztera, coronel de la Policía Federal austríaca de lo criminal, dijo hoy que en la lista de países con involucrados figuran España, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, México, Panamá, Perú, Venezuela y Paraguay, además de Puerto Rico.

LA DESARTICULACION

En un servidor de una empresa de internet en Austria fueron hallados ocho bancos de datos con videos, a los que habían accedido más de 8.000 usuarios en 24 horas, sin que la empresa tuviera conocimiento del contenido, según el ministro.

Los archivos de internet "mostraron los más graves abusos sexuales contra niños", según dijo Platter.

Entre los sospechosos, 23 proceden de Austria, de los que 14 ya han confesado su culpabilidad, otros 600 son investigados por el FBI en Estados Unidos y 400 han sido interrogados por las autoridades alemanas.

La Policía Federal austríaca ha confiscado 31 computadores personales, siete computadoras portátiles, 23 discos duros externos y otros sistemas de almacenamiento de datos, así como 1.132 DVD, 1.428 disquetes y 213 videocasetes con un total de 8 terabytes de material pornográfico infantil.

En julio de 2006 llegaron los primeros indicios que condujeron al descubrimiento del caso al denunciar el propietario de un servidor de internet en Austria que habían sido cargados en su sistema ocho videos pornográficos por piratas cibernéticos.

El material pornográfico estaba conectado a un vínculo de una página rusa de internet, donde se ofrecía para ser descargado.

Platter precisó que esta página de internet fue cerrada inmediatamente y que el ministerio obtuvo la lista de usuarios que habían accedido a ella.

Entre los sospechosos se hallan, entre otros, estudiantes, escolares, trabajadores, funcionarios y jubilados.

Agencias