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Jefe de la FACH define como un “general distinguido” a padre de nueva Presidenta

Jefe de la FACH define como un “general distinguido” a padre de nueva Presidenta EL GENERAL OSVALDO SARABIA SALUDÓ AYER A MICHELLE BACHELET
Jefe de la FACH define como un “general distinguido” a padre de nueva Presidenta

Foto:El comandante en jefe de la Fuerza Aérea se reunió ayer a temprana hora con la Presidenta electa, hija del general fallecido por torturas de la FACH, Alberto Bachelet Martínez. 
 

Sarabia aseguró que para su institución “significa mucho la llegada de Michelle Bachelet a la Presidencia de la República, porque su padre fue un general distinguido de la Fuerza Aérea, el general Bachelet, y tiene un gran significado, porque es parte de la familia aérea”.

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Cuando en enero del año 2002, la hoy electa Presidenta de la República, Michelle Bachelet, asumió como ministra de Defensa inició su propio reencuentro -y simbólicamente el del país- con las Fuerzas Armadas a las que perteneció su padre, el general de la Fuerza Aérea (FACH) Alberto Bachelet, que fue víctima de la dictadura y murió de un infarto en 1974 tras ser sometido a torturas en la Cárcel Pública. Ayer este camino de reconciliación que protagonizó la ex secretaria de Estado fue refrendado por el comandante en jefe de la FACH, el general Osvaldo Sarabia, que después de una visita protocolar a la Mandataria aseguró que para su institución “significa mucho la llegada de Michelle Bachelet a la Presidencia de la República, porque su padre fue un general distinguido de la Fuerza Aérea, el general Bachelet, y tiene un gran significado, porque es parte de la familia aérea”.
Con estas palabras, Sarabia selló el nuevo trato del mundo castrense hacia uniformados que fueron perseguidos por el régimen militar por no ser partidarios del golpe de Estado que derrocó al Gobierno de Salvador Allende. Sarabia ya había tenido un gesto similar en marzo de 2003, cuando durante un consejo aéreo de generales, en el cual estaba presente la posterior abanderada de la Concertación, le rindió un homenaje al general Bachelet. En diciembre de ese mismo año propició la reincorporación de 79 miembros de la FACH -entre ellos el padre del senador Carlos Ominami- que habían sido expulsados y algunos también exiliados durante la dictadura. En esa época, Michelle Bachelet comentó: “Una parte mía que fue desgarrada hoy vuelve a formar parte de la Fuerza Aérea”.
Pero el gesto de Sarabia no fue lo único que ayer remitió a los traumas de la muerte del general y padre de la Presidenta electa. En una entrevista con Radio Mitre, de Buenos Aires (Argentina), la viuda del alto oficial, Ángela Jeria, recordó la muerte de su esposo: “Cuando viene el golpe, para las Fuerzas Armadas él fue calificado de opositor y se le hicieron cargos absurdos. Lo detuvieron, lo torturaron y su corazón -que tenía problemas- no resistió. Murió el 1 de marzo de 1974. No había cumplido los cincuenta años”, recordó Jeria.
La madre de la primera mujer que gobernará en Chile recordó que durante el régimen militar, ella y su hija denunciaron las violaciones de los derechos humanos que ocurrían en el país, hasta que ambas fueron “secuestradas juntas por la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA). Nos llevaron a una de las peores casas de torturas de Santiago, Villa Grimaldi (…) Estuve una semana encerrada en un cajón, vendada, atada y sin alimentos”.
También explicó que se reencontró con su torturador -el coronel (R) Marcelo Moren Brito, hoy preso en la cárcel militar de Peñalolén- en el ascensor de su propio edificio, donde vivían ambos. Tiempo después le dijo que lo había perdonado: “Un día me lo crucé y le dije que no lo odiaba por lo que hizo. A él se le llenaron de lágrimas los ojos y me agradeció. En ese momento, me sentí liberada”, reveló Jeria.
“Con mi marido nos conocimos cuando yo era alumna del liceo de mujeres. Nos casamos cuando yo tenía 18 años y él 21. Fue un matrimonio muy feliz. Durante 28 años tuvimos una vida muy plena”, contó la madre de Bachelet a Radio Mitre.
“Después de la muerte de mi marido, con mi hija (Michelle) decidimos ayudar a la gente que era víctima de violaciones de los derechos humanos en Chile. Yo empecé a denunciar estos casos en el exterior y al mismo tiempo a ayudar a salir del país a los familiares de la gente presa, detenida o muerta”, agregó.
Luego de contar su dramática historia, Ángela habló de la victoria de su hija en las elecciones presidenciales. “Estoy muy feliz, creo que ella (Michelle) es una persona maravillosa”, dijo orgullosa. Y agregó: “El pueblo chileno entendió eso y trabajó y luchó con ella para conseguir este triunfo”. LN

EVOCACIÓN

Mientras ayudaba a gente perseguida, Ángela Jeria fue denunciada, lo que la hizo caer en manos de la DINA: “Una de mis contactos fue detenida, la amenazaron con matar a su hijito y entregó mi nombre y el de mi hija”, recordó ella en Radio Mitre.

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