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Conócenos este martes, Gran Estreno !

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Pamela Jiles: Mi abuela cumple cien años

Pamela Jiles: Mi abuela cumple cien años

"Yo me convertí en luchadora social porque me identifico con mis hermanas, las mujeres. Y sobre todo, porque creo en la justicia… Me parece que algo hicimos, pero a ustedes les queda en herencia la mayor parte de esta tarea inconclusa"
(Elena Caffarena)

Foto: Tomada de "Elena Caffarena. Un siglo, una mujer", publicación del Servicio Nacional de la Mujer, marzo 2003.  

Me permití un título autorreferente sólo para desdecirlo en la segunda línea. A los diez años, yo sabía ya que esa mujer alta, rubia y delgada, con la que sostenía conversaciones de persona grande, en realidad no era mía.

Mi abuela es, ciertamente, una especie de abuela universal; la matriarca de un mundo progresista que a veces parece invisible, el modelo de cientos de feministas en Chile y otras comarcas, un monumento del Chile republicano aquel, en que fueron pocas las intelectuales "de buena familia" que entregaron sus talentos y capacidades a una opción nítida por los pobres y la justicia social. Elena Caffarena de Jiles, como se ha firmado toda la vida, es la abuela de todas y de todos los luchadores chilenos.

Curiosamente, hace una semana se han congregado algunos tributarios de ese mundo -sobrevivientes, derrotados o mejor ubicados- en La Moneda. Decidieron festejarla, en ausencia, porque ni a los treinta años ni ahora, que cumple un siglo, Elena disfrutó mucho de los homenajes.

Mujer práctica, mi heroína siempre prefirió los "resultados concretos y medibles" como cuando, por fin, votaron las mujeres chilenas en una elección -después de treinta años de una pelea que hoy parece surrealista-. Pero ocurrió la paradoja: a la mujer que redactó el proyecto de ley de voto político femenino se le prohibió votar.

Ella lo cuenta así: "Cuando se aprobó el voto femenino se hizo un acto solemne y publicitado, al que asistieron el presidente de la República, Gabriel González Videla, su señora, sus ministros, muchas personalidades, gente muy importante toda. Pero los miles de mujeres que habíamos propuesto la promulgación de esa ley y que habíamos luchado dos décadas por ella, no fuimos invitadas. Celebramos cada una en su casa, con nuestros hijos y nuestros maridos, trabajando como todos los días y soñando con un futuro más justo".

"Pocos días después, González Videla canceló mi inscripción en los registros electorales aplicándome la ’Ley Maldita’, porque yo defendía, en mi calidad de abogada, a cuarenta mujeres y sus más de cien hijos menores de edad que estaban prisioneros en el campo de concentración de Pisagua. Su único delito -el de las madres- era pensar distinto que el primer mandatario... El de los niños era, supongo, el de ser hijos de esas madres. Fui acusada entonces de comunista, de agitadora, de cabecilla de una revuelta... y me proscribieron".

UNA AGITADORA RUBIA

En estos días de rescate del olvido, varios me han preguntado cómo es mi abuela Elena. No sé muy bien cómo contársela a otros. Puedo decir que es una mujer tímida, quitada de bulla, mesurada, sobria. Desde chicas, a sus nietas nos dijo que una no tiene derecho a pasar de largo por la vida. A veces, le echo la culpa por inculcarnos esta tendencia a meternos en problemas o, como ella dice, a "enderezar curcunchos" y obsesionarse preferentemente con las camisas de once varas, cuando éstas valen la pena.

Mi abuela es una mujer moral, consecuente, que no se conformó con el destino de las burguesas de comienzos del siglo veinte, cuyo camino obvio era el de aprender a bordar, tocar el piano, vestir a la moda, bailar charleston y casarse bien.

Ella se casó con un hombre que le merecía respeto por inteligente y aguerrido. Se conocieron en una trifulca universitaria, cuando Elena pasó de manifestante a agitadora principal. Mi abuelo contaba que cuando estaba por entrar la policía a la casa central de la Universidad de Chile y se producía la consecuente estampida, vio a una rubia impecable subirse a una mesa y reorganizar a los manifestantes. Su atracción fue inmediata, duró cincuenta años, hasta la muerte de ese viejo chico, moreno, audaz, rotundo y malgenio que era mi abuelo Jorge Jiles.

Fui testigo de cómo él la miraba durante todos esos años, orgulloso de su espléndida rubia, que además era una brillante abogada, una de las diez primeras mujeres del país que estudió cuando se las separaba con una cortinita en las aulas universitarias, para que no "tentaran a los varones". Jurista destacada, autora de tratados que tienen vigencia hasta hoy, madre de tres hijos, abuela fanática de nietos y bisnietos, a los que permitió plácidamente quebrar cuanto jarrón y lámpara encontramos en nuestras correrías por la casona de Seminario, Elena ha sido una mujer que prefiere su casa a cualquier otro escenario y que ha arrancado a perderse, toda su vida, de los salones, bailoteos, embajadas, cargos, altares y presidiums.

Nunca pretendió tener una vida fácil. Consciente y responsable de su opción por la emancipación de los oprimidos, asumió de buen grado los costos de esa decisión. Nos ha dicho hasta el cansancio una frase que los nietos repetimos a coro: "Si quieres la felicidad de los estúpidos, nace en otra familia".

Como ambos eran exitosos profesionales, su situación material fue siempre próspera. Pero les tocó, como es natural en nuestro sistema para la gente como ellos, una cuota alta de persecución, prisiones, relegaciones y descrédito público. Había quienes encontraban especialmente insoportable que dos hijos de la burguesía se dedicaran a servir a los pobres, en vez de dedicarse cómoda y tranquilamente a disfrutar un buen pasar.

DE HERENCIA: UNA TAREA

Pero no sólo los del otro lado fueron incomprensivos con las causas que Elena Caffarena abrazó. En sus palabras: "En ese tiempo, y hasta hoy de cierto modo, resultaba muy obsceno hablar de emancipación. ¿Qué querían estas mujeres deschavetadas?, ¿buscaban un verdadero libertinaje?, ¿eran todas comunistas? Ningún partido, tampoco los progresistas, tenía mucho interés en aprobar el voto político para las mujeres, porque la respuesta electoral femenina era una incógnita. Ampliar la democracia resultaba riesgoso. Y a las que lo proponíamos se nos tildó de extremistas de Izquierda, de revoltosas".

La respuesta de Elena no sería breve. La formación de un movimiento amplio, pluriclasista, integrado por mujeres obreras y de clase media, analfabetas, prostitutas, artistas, intelectuales, dueñas de casa y profesionales, demoró décadas. Cada una de estas mujeres organizadas -fueron miles- se transformó en una activista, en el hogar y en la calle. "Nuestro objetivo no terminaba en obtener el derecho a concurrir a un acto electoral y manifestar una preferencia. Era también el derecho a ser candidatas, a ser elegidas, a expresar directamente las necesidades de las mujeres, y ampliar la base de la democracia en Chile que estaba reducida, por lo menos, a la mitad".

La abuela suele contextualizar esta historia con algunos detallitos, como señalar que hasta unos pocos siglos atrás se debatía acaloradamente si las mujeres teníamos alma. Una vez dilucidado el punto, se discutió durante años si la inteligencia femenina era comparable a la de los varones. "En la historia, el estado más permanente de la mujer ha sido el de deficientes mentales o incapaces relativas. A mí me tocaron los días en que no teníamos derechos ciudadanos: no debíamos opinar en política, ni administrar nuestros bienes, ni era bien visto que pensáramos demasiado. Y si se trataba de una mujer pobre, peor", ha dicho Elena.

Ella hizo lo que tenía que hacer. Muchas veces llegaron de Nueva Zelandia, Dinamarca o la Cochinchina a entrevistarla. Creo haberla escuchado en cientos de oportunidades catetear con algo que para ella es lo central: "Sería un desatino no reconocer que hemos avanzado en esta batalla. Pero el riesgo de convertir en monumento a las mujeres que participamos en esta etapa, es creer, equivocadamente, que la tarea está concluida. En las casas y en las calles hay mujeres bastante más interesantes que yo, que están luchando todos los días y que tienen mucho que decir, de aquí para adelante". Menuda tarea nos hereda esta abuela universal.

Hasta hace pocos años, mi abuela era famosa familiarmente por caminar con paso tan rápido y decidido que era difícil seguirla. Un ejemplo: me pidió que la acompañara a la primera elección después de la dictadura. Ella iba de sombrero y pantalón, a paso veloz, como siempre. Estaba feliz, radiante, ese día. Yo, su lazarillo, la perseguí acezante durante veinte cuadras hasta que llegamos al local de votación. Allí querían hacerla pasar adelante, saltándose la fila, por respeto a sus años. Educada pero tajante, Elena le dijo a la mujer que intentaba facilitarle el camino: "Muchas gracias, mijita, pero yo no me pierdo ni un milímetro de este trayecto". Cuando salió de la caseta de votación ya se había corrido la voz de que la que estaba votando tenía que ver con que todas las demás tuviéramos ese derecho. La aplaudieron mientras salíamos. Eran sus mujeres, sus hermanas que la reconocían. De regreso a su casa de toda la vida, nos fuimos silenciosas. No había nada más que decir


PAMELA JILES

Revista Punto Final

Camiroaga sale del clóset político

Camiroaga sale del clóset político

Martes 18 de agosto de 2009   

La Nación 

ANIMUS

 El conductor de TVN, Felipe Camiroaga, rompió con la tradicional y aparente neutralidad política de los rostros de televisión y ayer reconoció en Radio Cooperativa su intención de votar por Eduardo Frei Ruiz-Tagle en las elecciones presidenciales de diciembre próximo.

En el programa "Una nueva mañana", Camiroaga afirmó que "si Chile es un país admirado, es gracias a la Concertación", aunque reconoció que "hay cosas que mejorar como siempre y como todo", afirmó que votará por Frei porque "hizo un muy buen segundo gobierno de la Concertación".

El rostro de TVN aseguró que "jamás votaría" por un candidato que diga "voy a solucionar todos los problemas de los chilenos (...) porque eso es imposible".

A pesar de que Camiroaga negó tener algún contacto con Sebastián Bowen o algún otro personero del comando de Frei, no cerró las puertas a participar en la campaña "no sé si lo haría o no lo haría".

Para explicar su salida del clóset político el "Halcón de Chicureo" dijo que rechazaba la idea de que "por ser animador de televisión deba ser transversal" y señaló creer que "hoy valoramos mucho saber con quién estamos hablando".

 

Las 11 mujeres de Luis Miguel

Las 11 mujeres de Luis Miguel

Kenita Larraín figura en un ranking de conquistas de Luis Miguel

Está entre las últimas de una lista de "People". Se asegura que tras el romance, la modelo canceló su matrimonio con Iván Zamorano.

El Mercurio Online

Lunes 10 de Agosto de 2009 12:55

Foto: En el ranking de conquistas del cantante, se asegura que tras el encuentro con Larraín, la modelo canceló su boda con Iván Zamorano. Foto: Portada People

 SANTIAGO.- "Las 11 mujeres de Luis Miguel", se titula el especial que elaboró en su sitio web la revista "People" en español para abordar los no tan secretos romances del cantante mexicano.

La sorpresa es que en el ranking, junto a Lucía Méndez, Mariah Carey y Daisy Fuentes, entre otras, aparece Kenita Larraín. Vea el listado aquí.

De la chilena, se asegura que aún mantiene un romance con el artista. Esto pese a que en el reality "Pelotón" que emite actualmente TVN, la modelo se deja querer por el "recluta" Nabih Chadud (famoso por tener sexo en el encierro con  la adolescente Angie Alvarado).

Sin embargo, "People" sostiene que la relación del mexicano con la modelo de TV es más que un encuentro fugaz. Pero no se precisa el tiempo del romance a diferencia de las otras conquistas del cantante. Con Mariah Carey, por ejemplo, se consigna que la relación duró tres años.

¿Es Kenita Larraín parte de uno de los tantos romances paralelos y simultáneos de Luis Miguel?

Según la revista, la modelo y el intérprete de "La Incondicional" se conocieron en "un casino de Punta del Este, Uruguay, a finales de 2004". Y en el apartado, "¿Qué pasó con ella?", se escribe:

"Meses después de haber conocido al Sol (en alusión al cantante) en febrero del 2005, la modelo chilena canceló su compromiso de matrimonio con el jugador de fútbol Iván Zamorano. Un año más tarde se casó con el tenista Marcelo Ríos, de quien se separó meses después. En noviembre del año pasado, la modelo y el cantante estuvieron juntos en Punta del Este, y en mayo pasado fueron captados en un casino de las islas Turcos y Caicos".

Recientemente Larraín confirmó en "Pelotón" que tuvo un encuentro con Luis Miguel, tras la aparición de un video en el que aparece junto a él apostando en un casino.

 

 

A los 96 años murió el recordado actor Emilio Gaete

A los 96 años murió el recordado actor Emilio Gaete

 Partió el eterno galán de Chile

 Por MARCOS MORAGA / RODRIGO ALVARADO / La Nación 

Lunes 17 de agosto de 2009   

El alcalde de "La pérgola de las flores" y sempiterna pareja actoral de Silvia Piñeiro falleció por causas naturales en su casa. "Fue uno de los grandes actores de Chile y sobre todo un pionero de la radionovela", dice su amiga Nelly Meruane.

 

Foto: A las 13 horas en la Parroquia Santa Elena de Las Condes se realizará el funeral de Emilio Gaete. Luego, su cuerpo será trasladado al Cementerio General y seguramente recibirá un homenaje de “alcalde” de parte de las pergoleras de verdad.  

Hoy a las 13 horas volarán los últimos pétalos por Emilio Gaete, cuando comience el funeral para el más célebre alcalde de la obra "La pérgola de las flores". El actor falleció en la madrugada de ayer por causas naturales, contando 96 años, siete de ellos enfrentado a las secuelas de un infarto cerebral que sufrió en 2002.

Gaete participó en el estreno de "La pérgola de las flores", en 1960, donde compartió escenario con las actrices Ana González, Silvia Piñeiro y Carmen Barros. Fue justamente con Piñeiro que inauguró una de las sociedades más queridas de la temprana pantalla nacional con la serie "Juani en sociedad". La dupla venía probada en obras de los años 60 como "100 mujeres y un playboy" y "Adán y Eva en La Mayor". Y fue la muerte de su amiga Silvia Piñeiro en 2003, uno de los golpes más fuertes en la vida de un actor que durante los últimos años poco salía de la cama y que no titubeaba a la hora de criticar a la televisión contemporánea.

En junio de 2003, por ejemplo, comentó con La Estrella de Arica sobre los nacientes realities shows, en esos años representados por "Protagonistas de la fama": "¡Vayan a bañarse! que me cuenten el cuento a mí. En un mes no se puede ser actor".

Gaete nunca estudió teatro, pero ya en los años 40 su voz se entrenaba en los radioteatros nacionales, inaugurando su biografía artística con el papel del padre Francisco en "Las llaves del reino". "Era tan real, que las viejas llegaban a confesarse y yo le decía al portero: mire, las viejas no; pero si hay alguna chiquilla bonita, yo la confieso", recordó en Arica. Y de ahí, su nombre se asoció a las luminarias del cine en español: en los cincuenta se trasladó a México y luego a Argentina, donde compartió créditos con Libertad Lamarque, Pedro Armendáriz, Mirtha Legrand y María Felix, de quien conservaba una foto juntos en su casa.

CABALLERO ARISTÓCRATA

La desaparición de Gaete se suma a la de otras figuras de sus dos obras más emblemáticas, "La pérgola de las flores" y "Juani en sociedad", como Ana González y la propia Piñeiro, además de Jorge Guerra y Sonia Viveros. Paradójicamente, el funeral de su madre unió a una de las parejas más añosas del teatro y la televisión: Juan Carlos Bistoto y Nelly Meruane.

"Le fui a dar el pésame y me invitó a ver ‘Juani...’, vi a Nelly y a los 45 días nos casamos".

La aludida está triste. "Me viene una melancolía por todos los años que trabajamos juntos. Y me doy cuenta que de esa obra estoy quedando sólo yo. La Sonia, Silvia y ahora Emilio, que era un caballero por donde se le mirara y tenía una voz privilegiada".

Para la actriz fue uno de los grandes actores de Chile y, sobre todo, "un pionero de la radionovela junto a Mireya Latorre. Hicieron las grandes radionovelas de este país".

En eso coincide Héctor Noguera, quien alguna vez hizo de yerno de Gaete en "Juani...". "Era muy aristócrata", dice Tito, quien admite que a pesar de no haber hecho "un personaje de carácter sino, el mismo papel de galán toda la vida, desde niño lo admiré por sus obras de radioteatro". LN

Revisa acá su aparición en la película"Largo Viaje" (1967) de Patricio Kaulen.

 

 

SALUDOS DESDE CHILLÁN...

SALUDOS DESDE CHILLÁN...

Hola....

 Con especial afecto deseo saludarlos y felicitarlos por su blog, yo me llamo Luis Becerra (Tono), soy músico chillanejo que cultivo la música de Rock Clásico de los 80’ con tintes latinoamericanos...estoy en una fuerte compromiso por difundirme en mi país y en otras latitudes con mi mensaje y mi sello musical.... Si desean pueden escuchar, bajar y /o promover mi música, aquí les mando algo que lo que será mi 2do. disco inédito denominadom "MINGA" en www.myspace.com/tonobecerra , luego del primero llamado "Canto a lo Humano" gracias al premio Fondart Nacional 2000...

...Vaya un abrazo a todos y que lo pasen bien !!!

 Tono

09-9000995

tono.becerra@gmail.com

 

 

Los 20 años de Los Venegas: el espejo de la clase media

Los 20 años de Los Venegas: el espejo de la clase media

Domingo 2 de agosto de 2009   

 Por Daniel Gómez Yianatos / La Nación Domingo 

La serie de tvn está para récord guinness

 Los 20 años de "Los Venegas": el espejo de la clase media

Tras el primer capítulo, algunos no le dieron una semana de vida e incluso criticaron que evocaba a la Unidad Popular. Con el tiempo, ya convertida en el reflejo de la familia en los años de la Concertación, la sitcom ha debido lidiar con la escasez de presupuesto y el desprecio de la industria televisiva.

 En mayo de 1989, tras el primer capítulo de "Los Venegas", una crítica de espectáculos de un matutino santiaguino auguró que la serie no duraría más de una semana. Con tono incendiario, la columnista exigió a las autoridades de Televisión Nacional que sacaran de pantalla a este clan que evocaba a la Unidad Popular con mensajes subliminales. Prematuramente en el paredón televisivo, el elenco asumió que la invitación de Patricio Campos, histórico libretista de "Sábados gigantes", no sería más que un experimento.

A 20 años del debut, marca que supera por varios cuerpos a sitcoms tan exitosas como "Seinfeld" o "Friends", la incertidumbre sigue metiendo su nariz en esta familia. La nueva temporada siempre es una quimera. Amarrados a un presupuesto que apenas se ha reajustado con el IPC en estas décadas, la vigencia de "Los Venegas" constituye un milagro televisivo. Nadie sabe a quién prender las velas, pero ahí están, fijos al almuerzo con su imborrable cortina musical: chubidubi-dubi-ue-chubidubi-ba ba-chubidubi.

Tal como dijo Marta Larraechea en 1995, cuando, para variar, surgían voces que solicitaban retirar el programa, el grupo se ha convertido en el reflejo de la familia chilena en los años de la Concertación.

"El programa muestra la evolución de la clase media, porque los actores y libretistas pertenecemos a ella. Es la familia normal del país", cuenta a LND el actor Jorge Gajardo, quien interpreta al patriarca Guillermo Venegas.

El famoso "Pelao" partió como cualquier chileno a finales de los ’80. Sin acceso a crédito en los bancos ni en las multitiendas, se acostumbró a entregar parte importante del sueldo a su señora Silvia, siempre diligente y abnegada. Una cuota importante se guardaba en un sobre, donde ahorraban dinero para el "utilitario", vehículo que sería como una van de hoy.

"Silvia partió muy sometida, víctima de esta familia que la atrapa por completo. En esos años, muchas mujeres no terminaban de estudiar para dedicarse a sus hijos", recuerda Mónica Carrasco, esposa de Gajardo en la vida real y en la serie.

Con los años, Silvia se cansó de postergar su desarrollo personal. Se despojó de complejos y salió a la calle a repartir niños en un furgón escolar. El ahorro había valido la pena. En línea con la sociedad de la época, la mujer adquiría un rol preponderante a nivel de ingresos, tanto que en varias ocasiones salvó a Guillermo de caer por el despeñadero. Por esos años, Sexual Democracia, cuyo vocalista, Miguel Barriga, apareció en un capítulo de "Los Venegas", imponía canciones como "Ella gana más plata que yo" en la radio. En la actual temporada, con el hombre ya jubilado, Silvia sostiene los gastos con su labor de banquetera en los eventos del barrio.

Adriano Castillo, el inseparable compadre Moncho, el personaje nacional más cercano como ícono a don Ramón de "El Chavo del 8", recuerda que ese apoyo de Silvia fue fundamental para salir del hoyo financiero que les dejó la pyme que armaron con Venegas.

"Como el Huaso Retamales (Fernando Farías) nos basureaba tanto en la oficina, nos independizamos y armamos un local de venta de huevos. El Pelao se creía gerente general, mientras que el Moncho se quedaba con la caja chica para salir con mujeres. Así quebramos", precisa Castillo muerto de la risa.

Con todos estos inconvenientes, el matrimonio pudo cumplir su principal deseo: que sus dos hijos fueran a la universidad. Hoy, en Chile el 70% de los estudiantes representa la primera generación, dentro de sus respectivas familias, que cursa estudios superiores. Los regalones Paola y Memo sacaron títulos de Enfermería e Ingeniería Forestal.

Jorge Ramírez, editor de libretistas y por largos años director del programa, le da más mérito a Silvia en este éxito.

"La mujer aquí siempre saca la cara. Lava ropa ajena, vende quesos o cosméticos. El hombre, mientras tanto, se deprime", plantea.

Para Ramírez, la incorrección de Moncho Cabrera ha sido decisiva en la serie. Como el núcleo familiar no puede permitirse vicios, el compadre de Venegas, tan fanático de las mujeres y las carreras de caballos como Henry Chinaski, el alter ego del escritor Charles Bukowski, ha mostrado con humor el lado perverso de la clase media.

"Moncho es un fresco, un chanta, con potencial de cabrón. Los chilenos también somos así. Si en un negocio el casero te da cinco lucas de sobra, fregó no más. Nadie piensa mucho en esos actos de deshonestidad. En nuestro país, para muchos, es hasta una virtud", señala.

Castillo también rescata la figura de su personaje como el típico chileno que ha reventado sus tarjetas de crédito y hace la "bicicleta" a fin de mes con préstamos furtivos.

"Vive encalillado. Ya no pide créditos en los bancos o las tiendas porque no puede. Es el niño símbolo de Dicom. Por eso lo tiene que salvar el Pelao", afirma sobre la condición del bolsero más longevo de la pantalla chica.

Según Francisco Zañartu, otro libretista histórico del programa, "los Venegas tienen la gracia de ser una familia que puede ubicarse en La Florida o en el barrio Gran Bretaña, de Playa Ancha, en Valparaíso. La conexión ha sido muy fuerte en regiones. Hace unos 15 años, Sergio Valdés, el actor que encarnaba a Memo, fue tan acosado por las liceanas en La Serena, que tuvieron que pedir protección policial".

Fábrica de salchichas

Antes de que se promulgara la Ley de Jornada Laboral, el elenco grababa los lunes todos los episodios de la semana. Ni siquiera el aluvión de agua, barro y árboles del 3 de mayo de 1993, que surgió desde la Quebrada de Macul y arrasó con calles enteras, detuvo el trabajo que se extendía casi sin interrupciones desde las 9 de la mañana hasta la 1 de la madrugada.

En 1989, cuando Patricio Campos y Cristián García- Huidobro presentaron la idea de recrear una familia como los Valverde o los Eguiguren al fallecido dueño de Chilefilms, José Daire, quedó sellado el ingreso del programa al incómodo limbo que separa a TVN de cualquier productora.

"Siempre ha sido una lucha contra la falta de recursos. Los libretistas teníamos una planilla en la que, de acuerdo al presupuesto que tenía Chilefilms para los sueldos de los actores, se definía en cuántos capítulos podíamos utilizar a cada personaje. Guillermo Venegas era el único que estaba en todos", precisa Hernán Meschi, otro de los cerebros de la serie.

Ramírez, Zañartu y Meschi son vecinos. Viven a pocas cuadras en La Reina. Su amistad viene de los ’80, años en que intercambiaban sus libros de poesía y participaban en colectivos culturales audaces y vanguardistas, sin apoyo de ninguna institución. Solitos irrumpieron con agrupaciones como El Teniente Bello o Luger de Luxe.

Su llegada a "Los Venegas" fue producto del azar. Acostumbrados al sagrado concepto de la autoría, les hervía la sangre cuando Campos tachaba con rojo los libretos o movía comas. La costumbre apagó esas aprensiones.

"‘Los Venegas’ siempre ha sido una fábrica de salchichas. Todo se hacía con lo mínimo y a la rápida", admite Ramírez.

La situación se hizo más compleja en el momento en que Juan Carlos Altamirano, el antecesor de Vicente Sabatini (hoy en Chilevisión) en la gerencia de programación de TVN, estableció que no era necesario comprar 220 capítulos al año. Bastaba con 120 episodios y luego se repetirían.

Como el rating se mantuvo cercano a los 10 puntos con esta experiencia, el canal quedó feliz con el negocio. Hasta hoy, pese a que existe una ley al respecto, nadie recibe un peso por los repasos de temporada.

"TVN y Chilefilms se han traspasado la responsabilidad todo este tiempo y ninguno ha querido hacerse cargo del pago", acusa Mónica Carrasco.

Con 3 mil capítulos en el cuerpo, cifra con la que incluso podrían postular seriamente al Récord Guinness, el equipo tiene claro que nadie se hizo millonario con la serie.

Según sus cálculos, la plata que ganaban los actores de "Friends" por un solo capítulo equivale a los beneficios obtenidos por todas las personas que alguna vez pasaron por "Los Venegas" en estos 20 años. No les importa. Tampoco la despectiva distancia que ha tomado la industria televisiva respecto de su trabajo o la constante incertidumbre sobre el futuro del programa. Por algo son el emblema de la clase media chilena. //LND

 

Sé quién asesinó a Michael

Sé quién asesinó a Michael

Lunes 13 de julio de 2009   

 La Nación / Agencias 

 Latoya Jackson: "Sé quién asesinó a Michael"

Latoya asegura que ese "grupo de personas" robó 2 millones de dólares en efectivo y numerosas joyas de la casa de su hermano, que lo enganchó a las drogas, que lo aisló de su familia y amigos.

Latoya Jackson fue ayer la portada de dos de los principales rotativos sensacionalistas británicos, el News of the World y The Mail on Sunday, que ofrecen sendas entrevistas en las que la hermana del Rey del Pop asegura que Jacko fue asesinado y que ella sabe quiénes son los asesinos.

En el News of the World, que titula a toda página "Sé quien asesinó a mi Michael", Latoya afirma que son varias las personas responsables de la desaparición de su hermano y que la razón fue "una conspiración para hacerse con el dinero de Michael".

Sus declaraciones se conocieron días después de que el jefe de la policía de Los Angeles admitiera que el asesinato era una de las líneas de investigación, algo sobre lo que Latoya no tiene dudas.

"Hubo una conspiración. Creo que fue todo por el dinero. Michael valía más de 1.000 millones de dólares en activos por derechos de difusión musical y alguien lo mató por eso. Valía más muerto que vivo", dice la hermana mayor del cantante, que no da nombres de los asesinos.

Latoya asegura que ese "grupo de personas" robó 2 millones de dólares en efectivo y numerosas joyas de la casa de su hermano, que lo enganchó a las drogas, que lo aisló de su familia y amigos "para que se sintiera solo y vulnerable", y que lo obligó a trabajar "hasta la extenuación" para seguir ganando dinero.

Michael, según el testimonio de Latoya, no quería dar la serie de 50 conciertos que debían haber comenzado hoy en Londres. "Hace menos de un mes, yo dije que pensaba que Michael iba a morir antes de las actuaciones de Londres porque estaba rodeado de gente que no albergaba las mejores intenciones en su corazón", dice Latoya.

En las entrevistas revela otros detalles, como que el cantante no murió en su cama, sino en la del médico que vivía con el, Conrad Murray, al que acusa de desaparecer del hospital al que fue trasladado el cantante cuando ella empezó a hacerle preguntas.

"Se limitó a mascullar algo y me dijo algo así como ‘Michael no lo hizo, lo siento’. Algo no estaba bien. Me pareció extraño", dice.

Latoya asegura que ella fue quien insistió en que se le hiciera una segunda autopsia al cadáver después de ver que "tenía marcas de pinchazos en el cuello y en los brazos", y anticipó que conocer los resultados finales "será un shock" para todo el mundo.