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Centros Chilenos en el Exterior

Lo mío no es el sexo

Lo mío no es el sexo

Por El Bandido / La Nación 

May se la juega en Calentamiento Global

Aunque parece una niña de 17 años, hace poco se presentó junto a "Fem" en el escenario de la Quinta Vergara. Consuelo Schuster es hija de uno de los Huasos de Algarrobal y hermana de uno de los protagonistas de "Amango". Sin embargo, se negó a Araneda, su "Rojo" y a "Operación Triunfo". Una gran voz que mañana suena en la SCD.

Los que siguen este espacio se preguntarán qué hago escribiendo nuevamente esta crónica. Pues bien, se acordarán que mi editor quería despedirme y se enfermó. Corta. Se murió. Las coronarias no resistieron el alto nivel de escocés, polvos y melancolía en la sangre. Y chabela. La verdad, y no es porque ahora sea cenizas, creo que no era un mal tipo. Sólo demasiado respetuoso para estos tiempos y que se encabronaba con la insolencia de los periodistas jóvenes. Su tema es que nunca pudo superar que su raza de estudiantes luchadores del cambio global de los 70, se transformara en un montón de morsas acomodadas. Pero a rey muerto, serrucho puesto. Parece que hay Bandido para un rato más.

El nuevo jefe todavía no aparece aunque en la sección, como siempre, la corona se la prueban varios. Mi editor nunca me cayó bien, era el último tipo con el que hubiera cerrado un bar, pero es raro que cuando la sala de redacción todavía huele a gladiolo, mis colegas miren su escritorio como buitres y estrenen sus mejores pilchas para impresionar al Máximo.

Y hablando de muertos, hoy tuve un problema por eso de seguir eternamente los consejos de Cirilo. "Debes empelotar a tus entrevistadas, es lo que te va a dar buena estrella", decía. Y es que con esa mentalidad se creó calentamiento global. Pero me enfrenté a una encrucijada. Si hasta el título de esta crónica tuve que inventarlo para ver si en Internet (grande los foristas) el asunto prende. La cosa es que acababa de leer "Los cuadernos de Don Rigoberto", así que tenía listo una batería de preguntas cachondas, certeras y agudas. "Pero primero empelotarla", pensaba como militante del cirilismo, hasta que me topé con May, o Consuelo.

 ¿Qué hago, Negro, si cuando desnudas una entrevistada lo único que encuentras son acordes, una partitura y una garganta de oro? Y es que esta señorita, bastante pulga además, respira, transpira, proyecta (y hasta podría asegurar que evacua) música. Música, música y música.

Con Consuelo Schuster tuve que guardarme el cuestionario por donde mejor me cupo (y espacio hay) y caímos en las redes de una conversación agradable, sin sexo, pero de espíritu libre, tan libre que pude subir al ensayo de estos jóvenes y enérgicos músicos que acompañan a May, y escuché un temón dedicado a un perro. E incluso en el disco hay un cover de "La gotita" con big band. ¿Cómo no iba a ser todo música, Cirilo? Si la niña es hija de uno de los miembros fundadores de los Huasos de Algarrobal; su hermano es uno de los protagonistas de "Amango", su pololo toca con ella y su familia es amiga de Daniela Castillo. Con ese currículum la mezcla podría resultar bastante, por decirlo de alguna manera, extraña. Pero esta busquilla mujer de 25 que habla fuerte, tiene ojos azules, pupilas como aceitunas y mueve las manos con elocuencia vive con plenitud su mundo repleto de jazz, pop y rock. Y esta es la primera entrevista de un talento a primera vista.

-¿Por qué no quisiste entrar a "Rojo"?
-Pude haberlo hecho, también me llamaron de "Operación Triunfo", pero preferí concentrarme en lo mío. En esa época estudiaba en la escuela moderna. Quizás escogí el camino más difícil, el más largo pero finalmente resultó. Estoy segura que este proyecto va a andar muy bien.

-Más allá del talento, son pocos los músicos que logran destacar.
- Es que hay poca cultura musical y no muy buenos lugares donde tocar. Claramente esto no es Buenos Aires. Ahora, es cierto, pero yo tengo mucha fe. La gente me ayuda mucho. He descubierto un mundo lleno de gente talentosa y he trabajado con un grupo increíble.

-Pero tienes otra banda de jazz. Y si ellos salieran a tocar a otros países ¿qué pasa con May?
-Creo que el asunto podría ser al revés. Tengo muchas ganas de proyectarnos afuera, que es la forma un poco de subsistir en esto. Pero si tuviera que optar lo haría por May, este es mi proyecto y creo que está buenísimo.

-Tantas mezclas musicales te influyen, ¿cómo resulta esto en el disco?
-Son procesos que se dan con bastante naturalidad. Así como hacerme músico. Tengo influencias claras de muchas músicas, pero siempre me gustó mucho el rock y el pop. Me encanta Javiera Parra y Gwen Stefani, creo que por ahí va la cosa.

-¿Es tu primera entrevista?
-Como May si.

-Pues no te olvides de nosotros.
-No lo haré.


 

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