Saddam Hussein murió ahorcado en Bagdad

Las cadenas internacionales informaron que el ex dictador iraquí fue ejecutado cerca de las 6 AM en Irak (medianoche en Chile), dando cumplimiento a la condena por la matanza de 148 chiíes. CNN reveló que un testigo les confirmó el ahorcamiento, y añadió que algunos de los presentes celebraron con “bailes”.

lanacion.cl/Agencias

Cerca de las 6 AM (hora de Irak) se cumplió con la ejecución del ex Presidente iraquí Saddam Hussein en la horca, poniendo fin a la vida de un déspota que gobernó Irak con mano de hierro por 24 años y que se convirtió en el enemigo número uno de la Casa Blanca.

Hussein fue ejecutado tras ser hallado culpable por crímenes contra la humanidad por la masacre de 148 musulmanes chiítas en 1982 en Dujail, perpetrada tras un intento de asesinato contra el entonces Presidente en esa aldea.

La información, dada a conocer en primera instancia por cadenas internacionales y luego confirmadas por uno de los abogados del ex dictador iraquí, puso fin a una jornada de versiones y trascendidos que sembraron la incertidumbre sobre la hora en que se materializaría la condena.

La primera confirmación de carácter oficial se produjo cuando la televisión pública iraquí, al Iraqia, señaló que Hussein fue ejecutado al alba. Luego, la cadena estadounidense CNN reveló que un testigo de la ejecución les confirmó el ahorcamiento, y añadió que “hubo bailes” por parte de los presentes en el momento del deceso del ex dictador.

Hussein gobernó con mano de hiero Irak desde 1979 a 2003, cuando fue derrocado por la coalición estadounidense que invadió el país en marzo de ese año. El 13 de diciembre de 2003 fue capturado por tropas estadounidenses en un refugio en el que apenas cabía parado, en una escena que fue ampliamente publicitado por el gobierno de EE.UU. De hecho, cuando se conoció que el ex dictador fue condenado a la horca, la Casa Blanca emitió una declaración señalando que su condena era un triunfo para la democracia en Irak.

El principal temor de los analistas es que la muerte de Huseein provoque un recrudecimiento de la ola de atentados que sacude a Irak, y hacer engrosar la cantidad de bajas estadounidenses, que el último fin de semana navideño ya llegaban a 2.982, con más de 740 sólo durante este año.