En ceremonia sin prensa, general Ricardo Hargreaves entregó el mando de la V División

Tanque protagonizo un insolito choque con un poste

 El renunciado general Ricardo Hargreaves afirmó que "lo que dije no tiene ninguna connotación de carácter político, no comulgo con ninguna corriente política, ni de uno ni de otro lado", tras comentar ante sus subalternos -reunidos en el Patio de Honor del Regimiento de Caballería Blindada Dragones- las declaraciones formuladas a La Prensa Austral sobre el fallecimiento del general Augusto Pinochet, que le costaron su salida del Ejército.

En una ceremonia interna, realizada dos días antes de lo fijado originalmente y a puertas cerradas, Hargreaves hizo entrega del mando de la Quinta División de Ejército a su sucesor, el general de brigada, Luis Torres Aguirre, sirviendo de interventor el general de División, Jorge Matus. Hubo desfile de tropas y de material blindado, mientras afuera se apreciaba un inusitado despliegue de Carabineros y de personal de policía militar, todo ello para impedir el ingreso de la prensa.

Pese al carácter interno que tuvo el acto, la alocución de despedida del renunciado general se podía escuchar desde fuera del recinto, donde quedaron apostados los reporteros. En su adiós, Hargreaves manifestó que "una jugada del destino hizo que mi vida cambiara drástica y dramáticamente".

NO TIENE RENCOR NI PENA

Visiblemente conmovido, destacó que "se me ha pedido la renuncia por haber efectuado declaraciones a la prensa local. No comulgo con ninguna corriente política, ni de uno ni de otro lado, sólo pedí respeto por la muerte de un hombre y de un soldado (...) Yo acato lo que se me ordena (...) No tengo sensación de injusticia, no soy ni me siento víctima, no quiero compasión, soy un soldado militar. (...) No hay rencor, rabia, ni pena".

Además de los comandantes de unidades, oficiales y personal del cuadro permanente de la Quinta División, asistieron los generales de la Cuarta Brigada Aérea y de Carabineros y el jefe del Estado Mayor de la Tercera Zona Naval.

Terminado el almuerzo, Hargreaves, quien pertenece al arma de Caballería Blindada, recorrió por última vez, a bordo de un tanque, el patio del Regimiento Dragones acompañado del asumido comandante en jefe de la División y del general interventor, Jorge Matus. En su desplazamiento, el carro blindado chocó un poste del alumbrado público interior, el que terminó quebrado y sostenido sólo por los cables. El accidente fue comunicado a Edelmag, desde donde se les respondió que por tratarse de un recinto privado, la reparación del poste y del tendido eléctrico deberá correr por cuenta del Ejército.

HIJO DEL GENERAL TORRES DE LA CRUZ

La decisión del nuevo mando de no permitir la presencia de los medios de prensa en el acto militar, contrasta absolutamente con la política de puertas abiertas que mantuvieron los ex generales Waldo Zauritz, Luis Clavel e incluso el renunciado general Hargreaves.

El asumido general Luis Hernán Torres, acompañado del general Matus, efectuó, posteriomente, una visita al Regimiento Pudeto, donde se reunió con oficiales, personal del cuadro permanente y soldados profesionales. A la salida de la unidad militar, en un ambiente más distendido, dijo que la ceremonia de la mañana de ayer se efectuó con carácter interno para asegurar la tranquilidad del evento y evitar el acoso de la prensa al general Hargreaves.

Torres añadió que venía a una buena zona, que para él significa muchísimo desde el punto de vista militar, al tener la suerte de estar al mando de una División que hace 34 años fue comandada por su padre, el general Manuel Torres de la Cruz. Añadió que mantendrá la política de puertas abiertas y evitó referirse a la participación que su fallecido padre, también general, Manuel Torres de la Cruz, tuvo en el inicio del gobierno militar, período que ha sido criticado por las organizaciones de derechos humanos. El alto oficial señaló que durante su gestión no hablará de temas contingentes.

Respecto del incidente protagonizado por el tanque, respondió que el general Hargreaves, dada su pertenencia al arma de Caballería Blindada, quiso despedirse con un paseo durante el cual se produjo un hecho que calificó como un accidente. "Al no haber personas lesionadas, no pasa de ser un hecho anecdótico", expresó.

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