Presidenta Bachelet firmó instructivo para terminar con la discriminación en el sector público
La iniciativa –que da cumplimiento a una nueva medida del Plan 100 Días- dispone la implementación del Código de Buenas Prácticas Laborales y No Discriminación en todos los organismos y servicios del Estado, a fin de promover las relaciones igualitarias entre hombres y mujeres.
Este instrumento busca disminuir las desigualdades en el mundo del trabajo, especialmente las relacionadas con remuneraciones y discriminación al momento de contratar personal. Asimismo, propone políticas que contribuyen a mejorar el acceso, capacitación y desarrollo de la carrera profesional de la mujer y la conciliación entre la vida laboral y familiar para trabajadores de ambos sexos.
La Presidenta de la República, Michelle Bachelet, firmó hoy el Instructivo Presidencial que implementa el Código de Buenas Prácticas Laborales y No Discriminación para la Administración Central del Estado, instrumento que promueve la paridad de género y cumple una nueva medida del Plan 100 Días .
La Presidenta destacó que esta nueva iniciativa constituye “un avance muy concreto en el reconocimiento de la dignidad de las personas en el lugar de trabajo”. Dijo que la discriminación laboral es una barrera que entorpece el pleno desarrollo del país, por lo que “la erradicación de toda forma de discriminación es una convicción muy profunda de mi Gobierno”, recalcó.
La Mandataria explicó que este nuevo instrumento permitirá orientar a los organismos públicos hacia el logro de crecientes grados de equidad e igualdad de oportunidades, “porque este Gobierno quiere predicar con el ejemplo, y por ello nos imponemos voluntariamente este conjunto de obligaciones para desarrollar buenas prácticas laborales”. Resaltó que “nosotros queremos hablar mucho menos y hacer mucho más”.
Dijo, además, que ésta es una invitación a la empresa privada “a que participe de este esfuerzo, a que incorporen, de acuerdo a la realidad de cada empresa, estas propuestas”, para que se transformen en prácticas habituales.
Expresó, asimismo, que frente a ciertas críticas que no plantean ninguna propuesta alternativa, “la mejor manera de responder es cumpliendo y que sea la propia gente la que evalúe”. Dijo que el país “ha visto como hemos trabajado desde el 11 de marzo, y hemos trabajado sin parar. Estamos sembrando para tiempos largos, y los primeros frutos ya están a la vista”.
La actividad, realizada en una oficina del Servicio de Registro Civil en Santiago, contó con la asistencia de ministros de Estado, directores de servicios, empresarios y dirigentes sindicales; entre ellos, los ministros de Economía, Ingrid Antonijevic; Trabajo, Osvaldo Andrade; Vivienda, Patricia Pobrete; SERNAM, Laura Albornoz; Bienes Nacionales, Romy Schmidt; Justicia, Isidro Solis, y Obras Públicas, Eduardo Bitrán, además de dirigentes de la ANEF y el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Hernán Somerville.
Las medidas contenidas en dicho Código, elaborado por el Servicio Nacional de Mujer y la Dirección Nacional de Servicio Civil, además del Ministerio del Trabajo y la OIT, apuntan a disminuir las desigualdades entre hombres y mujeres en el mundo del trabajo y sus remuneraciones, especialmente las relacionadas con la discriminación al momento de contratar personal, en cuanto al sexo de quienes postulan, solicitud de fotos, test de embarazo, estado civil, número de hijos, origen étnico y discapacidad, entre otros aspectos.
Asimismo, propone políticas que contribuyen a mejorar el acceso, capacitación y desarrollo de la carrera profesional de la mujer y la conciliación entre la vida laboral y familiar para hombres y mujeres, incluyendo la protección de la maternidad y paternidad.
De acuerdo al instructivo, los diversos organismos y servicios del Estado deberán tomar las medidas necesarias para garantizar la debida difusión de sus procesos de promoción y selección, a través de los departamentos de recursos humanos o la oficina que corresponda. Asimismo, el jefe del servicio o subsecretario, en tal caso, elaborará un Plan Trienal de Buenas Prácticas que incorpore las directrices del Instructivo Presidencial, explicitando objetivos, metas, responsables, plazos y mecanismo de control y seguimiento, informando anualmente a la Dirección Nacional del Servicio Civil sobre su cumplimiento, quien a su vez remitirá un informe a la Presidenta de la República.
Este Código para el sector público -donde el 56% de los funcionarios son mujeres- constituye a la vez una invitación a las empresas privadas, cuyos directivos nacionales ya han sostenido reuniones con la ministra del SERNAM para informarse sobre los detalles y alcances del mismo para su eventual implementación.
Este instrumento busca disminuir las desigualdades en el mundo del trabajo, especialmente las relacionadas con remuneraciones y discriminación al momento de contratar personal. Asimismo, propone políticas que contribuyen a mejorar el acceso, capacitación y desarrollo de la carrera profesional de la mujer y la conciliación entre la vida laboral y familiar para trabajadores de ambos sexos.
La Presidenta de la República, Michelle Bachelet, firmó hoy el Instructivo Presidencial que implementa el Código de Buenas Prácticas Laborales y No Discriminación para la Administración Central del Estado, instrumento que promueve la paridad de género y cumple una nueva medida del Plan 100 Días .
La Presidenta destacó que esta nueva iniciativa constituye “un avance muy concreto en el reconocimiento de la dignidad de las personas en el lugar de trabajo”. Dijo que la discriminación laboral es una barrera que entorpece el pleno desarrollo del país, por lo que “la erradicación de toda forma de discriminación es una convicción muy profunda de mi Gobierno”, recalcó.
La Mandataria explicó que este nuevo instrumento permitirá orientar a los organismos públicos hacia el logro de crecientes grados de equidad e igualdad de oportunidades, “porque este Gobierno quiere predicar con el ejemplo, y por ello nos imponemos voluntariamente este conjunto de obligaciones para desarrollar buenas prácticas laborales”. Resaltó que “nosotros queremos hablar mucho menos y hacer mucho más”.
Dijo, además, que ésta es una invitación a la empresa privada “a que participe de este esfuerzo, a que incorporen, de acuerdo a la realidad de cada empresa, estas propuestas”, para que se transformen en prácticas habituales.
Expresó, asimismo, que frente a ciertas críticas que no plantean ninguna propuesta alternativa, “la mejor manera de responder es cumpliendo y que sea la propia gente la que evalúe”. Dijo que el país “ha visto como hemos trabajado desde el 11 de marzo, y hemos trabajado sin parar. Estamos sembrando para tiempos largos, y los primeros frutos ya están a la vista”.
La actividad, realizada en una oficina del Servicio de Registro Civil en Santiago, contó con la asistencia de ministros de Estado, directores de servicios, empresarios y dirigentes sindicales; entre ellos, los ministros de Economía, Ingrid Antonijevic; Trabajo, Osvaldo Andrade; Vivienda, Patricia Pobrete; SERNAM, Laura Albornoz; Bienes Nacionales, Romy Schmidt; Justicia, Isidro Solis, y Obras Públicas, Eduardo Bitrán, además de dirigentes de la ANEF y el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, Hernán Somerville.
Las medidas contenidas en dicho Código, elaborado por el Servicio Nacional de Mujer y la Dirección Nacional de Servicio Civil, además del Ministerio del Trabajo y la OIT, apuntan a disminuir las desigualdades entre hombres y mujeres en el mundo del trabajo y sus remuneraciones, especialmente las relacionadas con la discriminación al momento de contratar personal, en cuanto al sexo de quienes postulan, solicitud de fotos, test de embarazo, estado civil, número de hijos, origen étnico y discapacidad, entre otros aspectos.
Asimismo, propone políticas que contribuyen a mejorar el acceso, capacitación y desarrollo de la carrera profesional de la mujer y la conciliación entre la vida laboral y familiar para hombres y mujeres, incluyendo la protección de la maternidad y paternidad.
De acuerdo al instructivo, los diversos organismos y servicios del Estado deberán tomar las medidas necesarias para garantizar la debida difusión de sus procesos de promoción y selección, a través de los departamentos de recursos humanos o la oficina que corresponda. Asimismo, el jefe del servicio o subsecretario, en tal caso, elaborará un Plan Trienal de Buenas Prácticas que incorpore las directrices del Instructivo Presidencial, explicitando objetivos, metas, responsables, plazos y mecanismo de control y seguimiento, informando anualmente a la Dirección Nacional del Servicio Civil sobre su cumplimiento, quien a su vez remitirá un informe a la Presidenta de la República.
Este Código para el sector público -donde el 56% de los funcionarios son mujeres- constituye a la vez una invitación a las empresas privadas, cuyos directivos nacionales ya han sostenido reuniones con la ministra del SERNAM para informarse sobre los detalles y alcances del mismo para su eventual implementación.
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