Un héroe ordinario
A Renato le conocí en La Habana, como consecuencia del golpe de Estado cívico-militar del 11 de septiembre de 1973. Ni él ni yo llegamos allí por gusto, ni por conocer el Caribe. Ambos militábamos en la JS y cada uno en su puesto apoyábamos el gobierno de Salvador Allende. Él arriesgó su vida, y sobrevivió gracias a un concurso de circunstancias que no logró salvar a sus compañeros del GAP asesinados por los militares golpistas. En un país serio, Renato González sería un héroe. En esta república de pachanga es un desconocido.
De sus compañeros de La Moneda se podría decir lo que Herodoto dijo de los atenienses que combatieron en la batalla de las Termopilas hace ya casi 2 mil 500 años:
"Aquí se mantuvieron hasta el final, aquellos que todavía tenían espadas usándolas, y los otros resistiendo con sus manos y sus dientes."
La democracia tutelada ha sido mezquina con los civiles y los soldados que lucharon por defender la Constitución y las leyes junto a Salvador Allende. Un olvido voluntario y medroso sustituyó el reconocimiento que se les debe. Tal vez algún día haya una placa en La Moneda que diga ni más ni menos lo que dice la inscripción del monumento a Leónidas y sus compañeros en el paso de las Termopilas:
“Viajero, ve y dile a Esparta que aquí caímos por cumplir con sus leyes…”
Luis Casado
ELADIO
En una cariñosa y solidaria tierra libre, Cienfuegos, Cuba, ha pasado al más allá, nuestro querido Pelao, nuestro compañero ELADIO.
Oriundo de San Antonio, ELADIO, fue siempre fiel al Allendismo, desde sus más tiernos días: a los 19 años de edad ya llevaba dos como escolta presidencial de Salvador Allende.
Luis Renato González Córdoba nació en San Antonio en 1954. Miembro de la Juventud Socialista y Eleno (miembro del Ejército de Liberación Nacional, de Che Guevara), ingresó al GAP a fines del año 1971.
El 11 de Septiembre del 73, al alba, escoltó a la Moneda al Presidente de Chile para enfrentar la asonada cívico-militar. Con 19 años, aparece en la icónica foto de los que abandonan la Moneda cuando lo ordenó el Compañero Allende. Viste un suéter a rayas blancas y oscuras (foto más arriba).
Por encontrarse herido fue llevado junto a la Payita a la Posta Central, y de ahí al hospital Barros Luco. Luego es llevado a una Embajada, saliendo prontamente al exilio en México y luego La Habana.
En la Posta Central fue testigo del secuestro de otros dos compañeros del GAP heridos. Salió de esta institución gracias a la acción solidaria de sus trabajadores. Fue uno de los cuatro combatientes sobrevivientes del combate en La Moneda. Todos los demás fueron torturados y ejecutados por la milicia traidora, en Peldehue dos días después.
Volvió a Chile el año 1998. Dada su edad y su pasado, le fue prácticamente imposible encontrar un trabajo estable y reinsertase en el Chile de la eterna transición a la democracia.
Sin más seguridad social que el PRAIS, no pudo hacerle frente a diversas dolencias como diabetes, hipertensión y problemas vasculares, que lo obligaron a trasladarse a Cuba, ya gravemente enfermo, donde fue atendido solidariamente desde mediados del año pasado.
Pese a su comportamiento ejemplar, no tuvo de parte de su Partido Socialista ni de la Concertación ningún apoyo ni reconocimiento. Al parecer, no claudicar en el ideario allendista es una tara.
En memoria y homenaje de Eladio, Luis Renato González Córdoba, sus compañeros del GAP, y de Organizaciones Sociales de San Antonio, del Partido Socialista y del Partido Comunista organizan una actividad conmemorativa para la tarde del miércoles 25 de junio.
ELADIO, ¡HASTA VICTORIA SIEMPRE!
Sus compañeros del GAP
23 Junio 2014
EladioViejo
Renato González y su hijo en Cienfuegos (Cuba) en enero de este año
©2014 Politika | diarioelect.politika@gmail.com