Satisfacción regional por viraje progresista en Paraguay

La Nación / Agencias 

Martes 22 de abril de 2008   

Gobernantes de la región saludaron la llegada de Fernando Lugo a la Presidencia del país

Desde el punto de vista político, el triunfo electoral del ex obispo "pone a tono" a su nación con sus vecinos del Mercosur, cuyos gobiernos están administrados por regímenes de centroizquierda, lo cual abre esperanzas, aunque también eventuales problemáticas.

Foto: Los diarios paraguayos reprodujeron en sus portadas la histórica elección de Lugo como próximo Presidente del país. Foto: AP

Los gobernantes de Sudamérica saludaron ayer con entusiasmo al ex obispo Fernando Lugo, cuya histórica elección como próximo Presidente de Paraguay ratificó la marcada predilección que la región ha evidenciado en los últimos años por los gobiernos de corte progresista.

Y es que cuando Lugo asuma el poder el 15 de agosto, la totalidad de países en la órbita del Mercado Común del Sur (Mercosur) pasarán a tener regímenes de orientación centroizquierdista: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, más los países asociados, Chile y Bolivia, así como Venezuela, en proceso de ingreso.

Lugo, quien el domingo consiguió la histórica hazaña de terminar en las urnas con 61 años de hegemonía del centroderechista Partido Colorado en Paraguay, admitió ayer que la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), una variopinta coalición conformada por diez partidos políticos y 20 organizaciones sociales y campesinas que él llevó al triunfo, se enmarca en ese auge de la "nueva izquierda" latinoamericana.

"Sigo soñando con la patria grande, con una Latinoamérica integrada, sin fronteras", declaró Lugo, quien confió en un traspaso pacífico del poder, expresó su disposición a negociar con otros partidos para garantizar la gobernabilidad y a impulsar una reforma constitucional en 2009.

Por todo esto, la puesta a tono política de Paraguay con sus vecinos recibió múltiples elogios. Así, el Mandatario de Ecuador, Rafael Correa, destacó que la victoria de Lugo contribuye a una nueva "América Latina socialista". A su vez, la Presidenta argentina, Cristina Fernández, calificó como una "excelente noticia para América Latina" la elección del ex obispo de 56 años y suspendido "a divinis" por el Vaticano, en 2006, tras renunciar a su estado clerical antes de lanzarse a la arena política.

Desde Nueva York, el Jefe de Estado de Bolivia, Evo Morales, felicitó a Lugo, afirmando que es "un revolucionario que se suma a la lucha de los pueblos con otra forma de pensar". Mientras, el venezolano Hugo Chávez manifestó su deseo de encontrarse lo más pronto posible con Lugo "para conversar sobre los planes de cooperación y complementariedad".

En tanto, el Mandatario nicaragüense Daniel Ortega destacó que con Lugo "el pueblo paraguayo inaugura una nueva era".

PROBLEMÁTICAS

Quien tuvo una tibia recepción respecto de Lugo fue Estados Unidos, cuyo Gobierno declaró que espera trabajar con el nuevo Presidente paraguayo. Sin embargo, Washington se reservó comentarios sobre las posibles políticas de Lugo, en medio de percepciones de que podrían ser similares a las de otros presidentes izquierdistas sudamericanos, como Hugo Chávez de Venezuela y Evo Morales de Bolivia.

En materia de saludos, una mención aparte mereció Brasil. Si bien el Presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, felicitó al ex obispo por su victoria en las presidenciales, le advirtió que no pretende revisar el tratado de la hidroeléctrica binacional de Itaipú, que rige hasta 2023, y del que el Presidente electo paraguayo ha reclamado cambios para cobrar más cara la energía que vende a Brasil.

Lugo sostiene que Asunción debe recibir entre 1.500 y 2.000 millones a precio de mercado y proclama: "Brasil explota a Paraguay".

Otro asunto que también puede generar problemas a futuro será la relación que el próximo Mandatario paraguayo quiera mantener con el Mercosur. Por de pronto, Lugo ha hecho suyos los reclamos generalizados en su país contra la falta de equidad y solidaridad de los dos grandes del bloque (Argentina y Brasil), que imponen numerosas trabas para el paso de productos paraguayos por sus respectivos territorios.

Lugo quiere consensuar salida a castigo religioso El ex obispo y próximo Presidente de Paraguay, Fernando Lugo, confesó ayer que prefiere “una salida de consenso” con el Vaticano, que lo suspendió “a divinis” en 2007 por renunciar a su estado clerical. “Yo prefiero seguir perteneciendo a esta Iglesia, que tanto amo, y al mismo tiempo buscar una salida de consenso que puede beneficiar a todos y, sobre todo, al pueblo paraguayo”, dijo Lugo, de 56 años y quien fue sancionado de ese modo tras pedir en la Navidad de 2006 la reducción al estado laical. “Me pongo a disposición de lo que haga el Vaticano, creo que hay varias opciones; no soy quien para aconsejar qué decidir, creo que ellos lo saben muy bien”, dijo el ex clérigo, que el domingo se impuso en las elecciones presidenciales con una ventaja de diez puntos porcentuales sobre la candidata oficialista, Blanca Ovelar. En respuesta, el portavoz vaticano, el jesuita Federico Lombarda, señaló que la Santa Sede “reflexionará y profundizará con calma, desde el punto de vista canónico, cuál puede ser la mejor solución” para definir el estatus en la Iglesia Católica de Lugo.

Chile destaca cercanía con gobernante electo El Gobierno chileno felicitó ayer al ex obispo Fernando Lugo, que fue electo presidente de Paraguay el domingo en “una elección muy transparente, con resultados claros”, destacó el canciller Alejandro Foxley. “Hay visiones comunes con el futuro Presidente de Paraguay y vamos a trabajar sobre la base de ellas para armar un programa de cooperación concreto en los planos sociales y económicos”, prometió el ministro de Exteriores chileno, quien agregó que la Presidenta Michelle Bachelet saludó vía telefónica a Lugo. Chile y Paraguay han tenido “excelentes relaciones bilaterales”, por lo que “esperamos que podamos profundizar en programas de cooperación sobre todo en un terreno que para el Presidente electo Lugo es fundamental, como la lucha contra la pobreza”, agregó el canciller.