Lanzan proyecto para transformar a Tres y Cuatro Álamos en Parque por la Paz

Enviado por "Pedro Alejandro Matta [e-mail]  

19 de Noviembre de 2007

En San Joaquín

Por  Ana Rodríguez Silva

Actualmente los terrenos están ocupados por las instalaciones del Centro de Observación y Diagnóstico ''El Arrayán'', que recibe a menores infractores de la ley. Sin embargo, con el objetivo de otorgarle un nuevo sentido al lugar y recordar a las víctimas de la dictadura militar, recientemente se formó el Comité Parque por la Paz y la Memoria.

Un nuevo destino pretenden dar diversas agrupaciones de vecinos de San Joaquín al recinto que albergó al Centro de Detención y Tortura Tres y Cuatro Álamos entre 1974 y 1977, durante la dictadura militar. Su objetivo es construir un Parque por la Paz y la Memoria en un lugar históricamente marcado por el dolor.

Actualmente, los terrenos ubicados en calle Canadá, altura 3.000 de Vicuña Mackenna, están ocupados por las instalaciones del Centro de Observación y Diagnóstico (COD) "El Arrayán", el cual recibe a menores de edad que han cometido delitos e infracciones y que llegan hasta este lugar, donde el Sename se encarga de su orientación y rehabilitación.

Con el fin de otorgarle un nuevo sentido al lugar, la gran mayoría de las organizaciones comunitarias de San Joaquín han respaldado la formación del Comité Parque por la Paz y la Memoria, Tres y Cuatro Álamos, que se constituyó de forma provisoria el pasado viernes 9 con el alcalde Sergio Echeverría en la presidencia. 

A cargo de la vicepresidencia del Comité quedó Ociel Núñez, ex preso político y presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Técnica del Estado (UTE) hasta 1973. Luego de dos años de detención en distintos centros, Núñez fue derivado a Tres Álamos a fines de 1975, donde permaneció por tres meses.

El dirigente recuerda que en el lugar se respiraba un ambiente de gran nerviosismo. "Era un punto de mucha tensión porque al lado estaba Cuatro Álamos, donde se registraba mucho movimiento. La proximidad a las personas que habían sido torturadas o que estaban en proceso de tortura era una de las cosas más complejas", asegura.

Desde su lugar de reclusión, Núñez tuvo la posibilidad de ver a través de una ventana la llegada de camionetas con más detenidos. "En esos lugares prima mucho la incertidumbre, el qué va a ocurrir después. Yo venía de haber tenido un ‘proceso', más o menos se entendía que era la parte terminal de mi situación, llevaba dos años como preso político. El personal en general no tenía una postura hostil, a excepción del jefe, el Coronel (r) Conrado Pacheco, que era muy hostigoso, que amenazaba constantemente, con bravuconadas", recuerda.

Reparación y enseñanza

El ahora vicepresidente del Comité considera que mantener un centro de detención de menores en un lugar con tal carga histórica "está muy mal", porque es "seguir con las mismas directrices de las cuales nos queremos distanciar".

Similar es la opinión de Paola Canto, miembro del comité provisorio, quien considera que el actual uso que se le da al recinto "es simbólicamente es un poco errático. Para una correcta reincorporación de los niños creemos que necesitan espacios distintos a donde están ahora".

Según explica, la entidad se empezó a formar en junio de este año, cuando distintas organizaciones territoriales y de derechos humanos de la comuna, junto al alcalde y personas individuales, se reunieron para comenzar a unificar criterios en torno a lo que Tres y Cuatro Álamos fue y representa, y proponer la construcción de un parque conmemorativo.

"Esos son sus únicos objetivos", asegura Canto. "En ningún caso estamos buscando la posible administración del lugar, sino que queremos levantar la temática de este espacio, reconocer en el gesto de recuperar Tres y Cuatro Álamos, una forma de reparación y de justicia para muchos habitantes de San Joaquín que fueron víctimas durante los años de dictadura".

Ociel Núñez considera que el lugar debiera transformarse en un recinto donde se dé cabida a las distintas expresiones de los intereses de la juventud y la población mayor, pero que "al mismo tiempo se tendría que rescatar algunos elementos testimoniales que den cuenta de lo que fue y que se transforme en centros de educación por la paz, donde se enseñen los valores democráticos y el respeto a los derechos de los hombres".

En su opinión, de la experiencia pasada debe rescatarse la enseñanza, por lo que los terrenos en que se instalaron Tres y Cuatro Álamos debieran convertirse en un lugar educativo que incorpore a las víctimas y también a las nuevas generaciones. "De esa manera se está rescatando la vida, es el mejor homenaje que se puede hacer. No lo veo como un lugar sólo de recogimiento, sino como un centro muy vivo, de mucha actividad, donde prime la formación de valores", dice.

Temática país

Dentro de las agrupaciones que apoyan esta iniciativa están el Comité de Derechos Humanos de San Joaquín Monseñor Raúl Silva Henríquez, la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de San Joaquín y partidos políticos, entre otros.

Como entidades a nivel nacional están la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Agrupación de Ex Presos Políticos, Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas (FASIC), Fundación de Documentación de Archivos de la Vicaría de la Solidaridad (Arzobispado de Santiago) y el Grupo de Amigos de Radio Nuevo Mundo.

El trabajo del Comité Nacional Parque por la Paz y la Memoria -cuyas elecciones democráticas se realizarán en un plazo de dos meses- se divide en comisiones de trabajo que impulsan las comunicaciones y las acciones en concreto, además de apoyar la solicitud que el 11 de enero de 2004 realizó el municipio al gobierno, donde se pide que no se amplíe el Centro "El Arrayán" y que además se declare el recinto como monumento histórico.

Según especifica Canto, no se está pidiendo el desalojo de los menores como una idea irresponsable. Dentro de los lineamientos del Comité está la defensa de los jóvenes recluidos en malas condiciones, que atentan contra sus Derechos Humanos. "Tiene que existir un centro de menores, pero tampoco creemos que ese lugar cuente con las características y el espacio necesarios para que ellos estén bien y se puedan rehabilitar".

Concientes de que este proyecto no está en manos del municipio de San Joaquín, los miembros del comité se plantean como responsables de sacar a relucir este tema y de sociabilizar a los habitantes de la comuna "porque no todos saben lo que aquí pasó", dice Canto.

Según Canto, "siempre hemos trabajado bajo la premisa de que ésta es una temática país. Nosotros nos hacemos cargo, la enfrentamos y mostramos", para captar apoyo del gobierno, ONGs e instituciones internacionales. La idea es repetir ejemplos como el del centro de detención Villa Grimaldi, en el marco de las políticas de gobierno de recuperación de espacios de importancia para la memoria nacional.

La dirigenta asegura que aunque el proyecto está en una fase todavía primigenia, la idea es "trabajar en la sensibilización interna y externa, mostrar que todavía existen estos espacios y han sido tapados de la memoria, trabajar en un posible proyecto de diseño, además de iniciar conversaciones con todos los agentes que puedan ayudar a recuperar este espacio".