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Centros Chilenos en el Exterior

Dicoex ; ¿Chile Somos Todos?

 Por : Roberto Tello

Con el lema "Chile somos todos", Dicoex ha renovado el viejo formato de su página dedicada a informar las actividades de nuestra colectividad en el mundo. Este nuevo formato resulta mucho más atractivo y ágil que el anterior, y está más actualizado en las noticias, tanto las que se originan desde las colectividades como las que genera la propia oficina.  En los archivos de la vieja página, quedan guardados no solo los acontecimientos más relevantes que produjo nuestra colectividad en el exterior, si no que también, un cierto desinterés que se evidenciaba en este medio por la relación estado comunidad, a cargo de Dicoex, y que hoy es cualitativamente superado por esta nueva iniciativa. 

Lo que se ha mantenido inalterable en esta nueva página es el tratamiento conceptual que se le da a la diáspora chilena. Se trata de mostrar a una colectividad plena, esforzada pero feliz; integrada, cohesionada, en fin, la familia ideal. Y como es lógico todo este mensaje subliminal lleva inevitablemente a la síntesis: Dicoex lo hizo.

Tanto las fotografías como los textos que acompañan a éstas, muestran a nuestra colectividad - mejor dicho a una parte de ella - en sus diferentes actividades, ya sean estas sociales o culturales, dando muestras de un espíritu por demás loable que merece ser subrayado. 

Desde la entrega de alimentos realizado por una organización dedicada a la cuestión social, pasando por el concurso de cuecas como forma de expresar nuestra cultura, hasta la nominación  como legislador en alguna lejana ciudad europea realizada a un destacado ciudadano de la décimo cuarta región, forman parte de una de estas ediciones. 

Quien se puede oponer a la divulgación de estos quehaceres de nuestra colectividad en la página "Chile somos todos", o pretender no reconocer los mismos sin caer en la mezquindad mas absoluta. Es mas, cualquiera de nosotros se debe sentir orgulloso de ver tanto esfuerzo y creatividad realizado por un porcentaje tan pequeño de nuestra colectividad. Pero, ¿es esto todo lo que concierne e interesa a los chilenos en el exterior?

Existe -por cierto- un trasfondo desde lo conceptual en el tratamiento de la problemática social, cultural y política de nuestra colectividad en el exterior, elaborada desde la página, que nos muestra a la misma como algo acabado, un estamento social fijo, homogéneo, dispuesto a producir hechos o actividades, impulsada por cierto empirismo de contenido casi folklórico y por demás virtuoso. Que sienta la idea de una colectividad plena, satisfecha desde  el punto de vista mencionado. 

Desde la Patagonia Argentina hasta Alaska y desde Australia hasta Europa, nuestra colectividad para Dicoex  es, en su quehacer, la misma y una sola. Lejos de resaltarse los matices entre un residente en un barrio obrero de Río Gallegos en la Patagonia Argentina  y otro radicado en la capital francesa y de estos con el ciudadano chileno que vive en Canadá, Dicoex nos muestra de forma casi publicitaria la idea de una colectividad abstraída totalmente de su tragedia que la llevó a constituirse contra su voluntad en un segmento de nuestra patria, desarraigado, sufrido, y quizás el más vulnerable socialmente hablando.

Subyace por cierto otra realidad de orden conceptual que se aleja y contradice con esta imagen idealizada que nos propone Dicoex desde su página Web, la misma esta relacionada con las reivindicaciones de orden jurídico - derecho a voto - que son la esencia en la recuperación de los chilenos residentes en el exterior como actores sociales, entendiéndose este reclamo, como una manifestación de nuestra propia voluntad, y su posible conclusión, no como algo  proveniente de algún legado hecho por una parte de la sociedad chilena hacia nosotros y adjudicado por compensación, más que por  una convicción  democrática. 

En este contexto, el derecho a voto para los chilenos residentes en el exterior contiene el elemento más significativo en nuestro camino al reconocimiento como ciudadanos chilenos plenos. La lucha entablada por nosotros para lograr este cometido, involucra esclarecer a la opinión pública, nacional e internacional, así como a nuestra propia colectividad, de las trabas objetivas y del chantaje al que nos vemos expuestos por parte de un sector político que se identifica con la defensa y el sostenimiento de valores absolutistas heredados de la dictadura militar, me refiero a los partidos de la Alianza por Chile, UDI, y Renovación Nacional, tenaces opositores a que se nos otorgue el derecho a voto. ¿Debería Dicoex sostener esta denuncia en su página Web? Es una pregunta que traslado a los lectores para su consideración. 

Se me ocurren otros temas, además de éste, que se podrían sostener desde la página dedicada a la colectividad chilena residente en el exterior, hecha por Dicoex, que tendrían  que ver con esa otra realidad, mucho mas ajustada a la promoción de los intereses genuinos de esta, y que se proyectan hacia la superación del conflicto entre el estado chileno y los chilenos residentes en el exterior.

Los descuentos que hace el Estado chileno a través del Fonasa a quienes reciben pensiones u otros aportes de él, que van a parar a los sistemas de salud y que nunca serán usados por el beneficiario que se encuentra en el exterior.

El ingreso de remesas generadas por esta colectividad al erario público chileno, y su utilización.

El término de leyes heredadas de la dictadura pinochetista, que recae sobre algunos ciudadanos chilenos que figuran en las fiscalias militares como terroristas.

La reconsideración de la ley 19.234 y sus modificaciones, que estandarizo los requisitos de los postulados a la misma, como si el chileno que vive fuera de Chile, contara con el micro a la vuelta de su casa para asistir a las oficinas del I.N.P, u otra repartición estatal, a presentar la documentación exigida por el entramado burocrático que se articuló alrededor de esta ley, o para buscar  como testigos - 3 como mínimo -  a compañeros de trabajo que uno no ve en el mejor de los casos, desde hace treinta años, para  hacerles firmar declaraciones juradas, condición sine quanon para ser considerado como exonerado político. 

En fin, existen por supuesto una cantidad mucho mayor de temas a los que nuestra colectividad en el exterior debería estar incorporada a través de un mecanismo de participación y consulta, al que debería dársele forma desde esta interrelación, y que deberían contar con un espacio de divulgación en la pagina "Chile somos Todos", teniéndose la oportunidad incluso, de darle el verdadero sentido a esta frase, Chile Somos Todos.

De mas del millón de chilenos que vivimos fuera de Chile, Dicoex nos dice que sólo el 8% esta organizado o muestra interés en hacerlo, queda más que claro que cerca de 920.000 chilenos desparramados por el mundo quedan fuera del contexto de integración diseñado por el Estado chileno a través de Dicoex. En otras palabras, Dicoex promueve una realidad parcial de nuestra colectividad, y lo hace en dos sentidos. Primero; articula la idea que una minoría del 8% es la expresión de toda nuestra diáspora, y segundo; que todos los que vivimos fuera de Chile conformamos un conglomerado de ciudadanos homogéneo e ideal.

Presentado de esta manera el trabajo de Dicoex, queda plenamente justificada la existencia de la misma tal y cual se nos presenta hoy, como así también el de su personal, especialmente el de su directora Anita de Aguirre, quien curiosamente, cuenta en su haber con mas horas de vuelo  en Primera Clase o en Business visitando a las colectividades residentes en Europa y Oceanía - de indudable importancia- que a los residentes en la República Argentina, en donde se concentra la mayor cantidad de chilenos fuera de Chile, superando incluso, a la suma del total de chilenos en el resto del mundo, y con realidades en muchos casos extremadamente duras.

Porque evidentemente no es lo mismo visitar los barrios obreros chilenos en Neuquén, Buenos Aires, Comodoro Rivadavia o Río Gallegos, que visitar Estocolmo, Paris, Oslo, Sydney o cualquier ciudad o comunidad de los países del norte primer mundista. De paso, también sabemos que estuvo en Buenos Aires allá por la semana Santa del 2007, pero que no se le vió por ninguna de las organizaciones de chilenos en la Argentina; más bien estuvo de incógnito, y con algún nivel de temor a ser descubierta por la colectividad (según dicen las malas lenguas).

Nota: Han pasado más de tres años de la finalización del censo para los chilenos residentes  en el exterior, y Dicoex no ha informado - por lo menos a los residentes en la Argentina -  sobre el análisis hecho por las autoridades de competencia del estado chileno, en cuanto a las posibles políticas a implementar para esta colectividad.

Uno de los argumentos centrales de esta iniciativa, estaba orientado hacia este propósito, no sabemos en el estado en que se encuentra el estudio del relevamiento, ni mucho menos si existen a partir de este, políticas que estén por proponerse o aplicarse. Seria bueno contar con la voluntad de Dicoex en este sentido, para que nos convoque, o informe a través de la pagina "Chile Somos Todos" sobre estos acontecimientos.

 

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