Grupo de extrema izquierda en la mira de la Justicia alemana
Foto: También en las protestas contra la cumbre del G8 estuvo activo el GM.
Adscrito a la extrema izquierda, el "Grupo Militante" es acusado de haber perpetrado varios actos de violencia contra inmuebles en la región de Berlín. Ahora, la Justicia intenta echar mano a 4 de sus integrantes.
Por primera vez la Justicia alemana ha dictado orden de arresto contra cuatro presuntos integrantes de la agrupación de extrema izquierda “Grupo Militante” (GM), que fueron sorprendidos tras intentar incendiar vehículos de las Fuerzas Armadas. Tres de ellos participaron directamente en los hechos, según la Fiscalía Federal, con sede en Karlsruhe, que los acusa de pertenecer en una agrupación terrorista.
El prontuario de GM
Hasta ahora, la Fiscalía no había logrado dar curso a órdenes de detención contra miembros de este grupo que desde el año 2001 ha llevado a cabo, presuntamente, dos docenas de acciones contra instalaciones de la administración pública, la policía, entidades económicas y judiciales. Ocho de ellas se perpetraron el año pasado, como un atentado contra la comisaría del barrio de Tempelhof, en Berlín.
Igualmente se acusa al Grupo Militante de haber lanzado un cocktail Molotov contra la sede del Instituto Alemán de Investigaciones Económicas (DIW) en Berlín, en noviembre de 2005. La organización incluso justificó en un mensaje ese acto, argumentando que el DIW es “parte institucional del ataque de clases organizado desde arriba”.
Los argumentos de la defensa
En ninguno de los atentados que se imputan al GM se han producido víctimas personales. Por esa razón, el abogado Wolfgnag Chalet, que representa a los acusados, criticó duramente los términos en que se plantearon las órdenes de arresto. A su juicio, es completamente inapropiado calificar de “terrorismo” el fallido intento de incendiar tres vehículos, sin haber puesto en peligro la integridad física de nadie.
En opinión del abogado, lo normal habría sido acusar a sus defendidos de intento de provocar un incendio. Y, dado que se trata de personas sin antecedentes penales, deberían haber quedado al menos en libertad provisional, ya que no existe peligro de que se den a la fuga.
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